Pokémon 4

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En tierras Rockeras era difícil de pillar buenos pokemon's, ya que la mayoría preferian vivir en el bosque por la abundancia de bayas, agua y plantas medicinales, los pocos que habían no eran muy buenos y siempre eran los mismos

Barb era de esas que deseaban tener un Pokémon sumamente raro y difíciles de pillar, muy quisquillosa para su edad tan joven.

Pero como dije antes, solo eran una gran variedad de lavitar o Charmander's que venían a qué la flama de su cola no se apagasen, pocos torchic que venían por el calor, Gabites que dormían en cuevas, numel, torkoal o slugma debiles que paseaban..

Hasta que un día escapó de su padre en un ataque de irá, adentrándose a una cueva de gran altura en un risco con lava callendo alrededor, llorando de vergüenza por su cobardia al huir abrazaba sus piernas sentada en el suelo, ella solo era una niña con problemas de irá y bipolaridad, provocando que sea insoportable para otros niños de su edad, menos para sus fieles amigos, Riff y Carol

—son unos idiotas!! No los soporto!!

Entre gritos, patadas y berrinches se desahogaba la princesa barb entre llantos y mocos, pero al darse vuelta vio a un Pokémon canino pequeño con huesos decorando su cabeza y cuerpo, sentado a su lado como si estuviera escuchándola

Toda esa tarde aquella cría y niña se quedaron juntos, una hablando sin parar y el otro sin dejar de escucharla hasta que el padre de Barbara llegó gritando en nombre de su hija preocupado, como toda infante quiso ir detrás de el corriendo mienstras gritaba su nombre, pero la gravedad y sus pies le hicieron una muy mala jugada casi callendo al fondo del presipisio si no fuera por el agarre de una mandíbula en sus ropas, aquel cachorro apenas y podía sujetarse a si mismo estando a pocos metros de caer junto a barb dentro de aquel agujero lleno de piedras filosas y rocas en punta

Ante la desesperación la princesilla lloraba y gritaba que no la soltará o se lastimaria, pero el peso no ayudo en nada haciendo que el pequeño Pokémon calleta junto con ella.

Barb como última acción lo abrazo fuerte protegiéndolo con su cuerpo hasta que sintió como aquel ser empezaba a crecer y aumentar de tamaño de golpe, un brillo azul la cego  y sin soltarse de el Pokémon este clavo sus fieras garras a la estructura dura de las rocas para treparse y salir de ahí con vida mostrando a barb lo que aquel cachorro había evolucionado para salvarla, un Houndoom de enorme tamaño, piel negra con cuernos enormes en la cabeza y huesos decorando en su cuerpo

Entre el fuego revivirán, en las cenizas resucitarán y con un lanzallamas te derrotaran

troll stuffDonde viven las historias. Descúbrelo ahora