SOLO UN ACUERDO

39: EPÍLOGO

SPENCER

<<Años más tarde>>

Siendo mamá y papá

Han pasado un chingón de años, pero me sigo viendo muy bueno.... Mas papacito.

Los cuatrillizos ya tienen cuatro años, mientras los demás no lo se, solo se que ya entrarán en la pubertad y no quiero eso.

Dalila me dejo.

Bueno, básicamente por una semana, ya que se fue a una misión en Honduras y me dejó a cargo de siete niños, que básicamente son míos.

- Papá queremos tacos -dice Damián

- ¿donde conseguiré tacos? -digo- Eso es en México.

- ¡vamos a México! -dice felices sus hermanos

Tienen un amor por la comida latina, especialmente por la de México, los tacos.
Aveces pienso que se irán a vivir allá, y yo feliz de la vida. Mentira. Dalila me mata.

- veré que puedo hacer -digo sin prometer nada.

Miro las páginas de todos lados, hasta que doy con un restaurante cerca, que ha tenido muy buena crítica.

Miro por la ventana y no! No! No! Dalila me matará!

- Niños! -grito y nadie me hace caso- ¡Tenientes!

Todos callan, ellos aman que los llamen así. Aunque Kiara dice que es un ministro, su rango debe ser superior siempre, es tan egocéntrica que no se a quien ha salido así.

- ¡que hacen! -grito- No! No deben meter nada de castillos inflables.

- papi... el vecino no los presto -dice Alexis sonriendo

Cuando miro el castillo ya está inflado y ya para qué hablar con tremendos tercos.

- Está bien. Pero no habrá nada de tacos, habrá ensalada de lechuga -digo serio y me devuelvo a la sala. Sin esperar respuestas.

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- ¿estas enojado? -dice Kiara ya con su pijama

- Si -digo serio y trabajando en mi oficina

- Unos besitos calmará eso -dice dándome en cada mejilla

- ¿tus notas? -pregunto cambiando de tema.

Kiara se sorprende y sonríe.

- Son de +A -dice feliz- nunca me preguntas... por eso.

- Porque no lo necesito, me llega todo a mi correo, pero porque tienes un -C, que te paso -digo

- Bu-Bueno no estudie ese día -dice- Pero lo recupere con una exposición, ahora tengo A.

- Debes mantenerte en tus notas normales, Kiara -digo tecleando en el computador- No pago de por gusto el instituto.

- Lo se papá -dice- ¿pero me quieres?

- No

- ouh..

- Te amo, mi mini ministro -digo sonriendo y me abraza- Debes superarme, debes alcanzar la meta.

- Lo haré papi -dice y se va a merendar

Mientras yo saco lo que ordene, mis tacos, ellos están castigados, yo no. Amo ser padre.

***

- Debo ir a clases -dice Alexis- llévame, por favor

- bien, vamos -digo- ¿no te gustaría estar en otra cosa?

- lo he pensado papá -dice- Creo que atletismo...

- Piénsalo bien, y lo que quieras te apoyaré -digo feliz manejando

Los niños se quedaron en la casa viendo películas, al cuidado de sus dos niñeras.

- Chao! -digo y se despide

Miro a Andrés y me llama. Ahora que quiere el pendejo.

- Ya vi que Dalila tuvo cuatro hijos más...

- si, conmigo llevan mi sangre, mi apellido -digo

- Pensé que teníamos una oportunidad -dice negando- Ahora se que es feliz...

Vaya a tenido cerebro, este hombre.

- Si ella es feliz -digo

- Hazla feliz, ningún ex te dijera esto, pero hazla feliz -dice y me da golpecitos en el brazo

Se marcha dejándome solo.

- La haré feliz -digo yéndome a mi casa donde mi demás hijos me esperan.

Llegando a casa, la casa está en silencio.

¡Es problema! ¡Es mucho silencio!

Busco en la sala de juegos, en la sala de cines, en el jacuzzi, en el jardín, entre otros lugares de la casa.

- ¡papi! -gritan de un megáfono.

Miro hacia arriba y todos están en un helicóptero, miro a Siete quien se ha convertido en teniente superior.

Los veo aterrizar en el espacio que tenemos de aterrizaje rápido, los niños bajan felices y solo miro a siete.

- Siete -digo entre dientes

- Ministro -hace el saludo- Venía a dejarle unos papeles, y los niños querían ir en un viaje en helicóptero....

- Más bien querrás decir Kiara -digo y asiente

- Ya sabe... es difícil decirle que no, cuando pone esos ojitos -dice y asiento sabiendo lo qué se siente

- Me retiro -dice yéndose en el helicóptero

Ya en la noche, Alexis se baña con sus hermanos, y vamos a ver a Dalila al aeropuerto, miro la casa y todo está en orden.

Bueno... gracias a las empleadas porque si no, ni un vaso estaría en su lugar.

- mami!! -gritan los niños felices y corren hacia Dalila

- Debemos contarte todo lo que hicimos -dice Liam

Sonrío y beso a mi esposa, susurrándole algunas cositas...

- ¿me extrañaste? -dice en susurro

- Demasiado -digo besándola- Algunos mocosos invadían mi cama cada noche... debes estar tu.

- Mocosos... son tus hijos -dice

- Nuestros -digo besándola y los niños nos abrazan

- Vamos a comer! -grita Benjamin

- Vamos -decimos su mamá y yo.

Miro a Dalila conversar con los niños y sonrío. Soy feliz, ellos lo son.

Fin

**

Se que es un epílogo muy.... Corto, pero HABRÁN EXTRAS, como en cada historia, si no que pido su tiempo.

Damos por finalizar la historia.

Muchas thanks!!

Aquí estuvo Ale