Secretos de familia

Capítulo 3

Yo era la cuarta generación de mi estirpe que pasaba por Menar. Mi familia tenía origen simple y humilde, nunca había sido demasiado adinerada. Excepto mi bisabuelo paterno, que fue dueño de varias hectáreas de tierra dedicadas a la ganadería. Nadie sabe cómo obtuvo aquellas tierras, debe ser uno de esos secretos de familia que nunca se revelan. Pero, según contaba mi abuelo, un día sin más, se volvió loco y perdió toda su fortuna. Cómo? También es un misterio.

Quizás me estaba volviendo loca como él. Quizás comenzaba a tener alucinaciones. Quizás la soledad y el tedio que me amargaban habían podido con mi cordura, la poca cordura que me quedaba.

Ya había empleado varias horas de mi vida en resolver el rompecabezas que era mi familia. En vano, por supuesto, porque mis entrevistas a los familiares solo obtenían respuestas como "No me acuerdo", "No lo sé", "Nadie nunca lo supo", etc. Pero, yo sabía que mentían. Cómo no iban a saberlo, joder?

Creé teorías que explicaban que la familia es un puto negocio. No, no es amor y apoyo como tú piensas.
Desde que nacemos, sutilmente los miembros de la familia tratan de encajarte en el lugar que 'te corrresponde', posiblemente para sustituir a alguien que murió o a alguien que te dejará su lugar como legado.

Y si tratas de salirte de ese lugar todos irán a por ti "No salgas del lugar que te corresponde!" Te dirán con cariñosos hachazos que desgarrarán tu carne. "Tu función es cuidarme cuando llegue mi vejez!", "Tu función es trabajar para ayudar a mantener esta familia!", "Tu función es cargar con mi culpa!".

No me crees? Te parezco una loca? Compruébalo si tienes huevos. Averigua quién es cada miembro de tu familia desde la última generación hasta que se pierdan las ramas del árbol genealógico, investiga la historia de sus vidas, busca coincidencias!

A la familia le encanta remover mierda, porque como te digo, es solo un negocio.

Me atacó la tos por haberme atragantado con el agua. Tanto que casi se me cayó el vaso y se me saltaron las lágrimas.
"Cómo coño se ha movido la cama?!" pensaba "A lo mejor solo ha sido una ilusión".
Dejé el vaso en la encimera de la cocina y subí las escaleras.
"Cuando entre, la cama estará en su lugar. Seguro que sí".