Historias protagonizadas por ships randoms (Solo apto para multishippers)
Drabble: de 100 a 500 palabras (🅓)
Viñeta: de 500 a 1000 palabras. (🅥)
One-shot: más de 1000 palabras (🅞)
Ningún personaje me pertenece son propiedad de Jeff Davis.
Cuando Noah se despertó el moreno con el que había pasado la noche anterior aún estaba entre sus brazos y sonrió al recordar lo bien que se lo habían pasado juntos.
—Buenos días —dijo Scott con voz adormilada y tallándose los ojos despertándose por el movimiento de Noah.
—Buenos días dormilón... ¿Quieres desayunar?
—Sii ¿podemos hacer hot-cakes? —pregunto mirándolo con una gran sonrisa y en ese momento Noah pensó que se veía mucho más joven de lo que le pareció el día anterior, se veía casi de la edad de su propio hijo, pero desecho rápidamente ese pensamiento.
—Claro —dijo devolviéndole la sonrisa, saliendo de la cama para bajar a la cocina.
Ya estaba terminado de cocinar cuando Scott entro en su campo de visión usando solo sus ajustados boxers y Noah tuvo que reprimir el impulso de olvidarse por completo del desayuno para cogérselo justo en la mesa.
—Huelen bien —dijo el latino sirviendo jugo en los vasos, mientras Noah ponía los hot-cakes en los platos— Y también saben bien —agrego mordiendo uno.
—Me alegra que te gusten y... Dime ¿Cuánto tiempo estarás en Beacon Hills? —pregunto Noah sentándose a su lado para saber si tenía alguna oportunidad de repetir lo de ayer.
—Unos días, pero es posible que no sea la última vez que regrese —dijo el chico con un tono de voz coqueto mirando al mayor.
—Bueno, pues eres bienvenido a regresar aquí, cuando desees —dijo intentando usar el mismo tono de Scott, haciendo crecer la sonrisa del moreno.
—Tal vez pueda regresar hoy... solo tengo que asistir a un compromiso con un amigo por la tarde.
—Sí, yo también estaré ocupado, pero puedo buscarte en tu hotel a eso de las 9:00
—Suena bien, por cierto ¿No sabrás de casualidad dónde está la casa Hale?
El mayor empezó a unir las señales, Scott trabajaba en el FBI, tenía aproximadamente la edad de Stiles y vino a Beacon Hills el fin de semana que se celebraba el compromiso de su hijo con Derek, frunció ligeramente el ceño pensando que si no hubiera estado tan distraído con lo mucho que le gustaba el moreno hubiera llegado antes a esa resolución.
Se preguntó cuánto tiempo podría ocultarle a su hijo que había tenido sexo con el chico al que ya llamaba su mejor amigo, después de solo un par de meses trabajando juntos, seguramente no disponía de mucho, así que solo por mera formalidad, pregunto:
—¿Cuál dijiste que era el nombre de tu amigo?
—Stiles, bueno no es su nombre, pero en el trabajo todos le decimos así.
🅓
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