¿Qué hacer cuando sentís tu corazón latiendo?
Siempre late, es por eso que vivís, pero en este momento lo sentís presente.
¿Qué hacer cuando nunca te sentiste de esta manera?
Vulnerable, desanimada, muy nostálgica.
¿Qué hacer cuando llueve?
Es el tiempo perfecto para sentir su presencia, su respiración en la nuca, sus brazos arrimados a tu cuerpo desnudo.
¿Qué hacer cuando le pensas?
Cuando te acordas de las bromas que decían. Cuando recordas las veces que te agarraba por sorpresa para darte un dulce beso.
¿Qué hacer cuando escuchas músicas?
Músicas que te recuerdan tanto lo bueno como lo malo.
¿Qué hacer cuando no sabes qué hacer?
Lo que haces, lo que debes hacer, es recordar los momentos no tan agradables.
A pesar de que sea doloroso de alguna manera, esos momentos demuestran cómo es esa persona.
Siempre pensé que las personas, al estar enfadadas o alteradas, muestran su verdadero yo. Ya que, en esos momentos de descontrol, no piensan con objetividad. Actúan de manera instintiva.
Dicen palabras sin filtros y hacen cosas sin remordimiento.
Cuando sentís tu corazón latiendo, cuando te sentís tan vulnerable como nunca antes, cuando llueve y es inevitable pensar en él, cuando escuchas música y no sabes qué hacer; en esos momentos tenes que pensar en lo negativo de todo lo que sucedió.
El porqué del desenlace.
Y por último pero no menos importante: agradecer porque la vida, el universo, Dios, llamale X, te abrió los ojos para darte cuenta de que no valía la pena. De que no era para vos, ni vos para él.
De que hay muchos peces en el agua y que no se acaba el mundo por una persona.
De que vales mucho y él simplemente no supo valorar lo brillante que sos.
