- Que han dicho que no nos van a ayudar y tú y yo no nos podemos encargar solos de una bebe, Daniel por el amor de Dios que no sabemos ni cambiar un pañal.
- Tenemos el libro - sonríe y yo ruedo los ojos - no lo niegues Max, nos hemos convertido en...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra George:
- ¿Lo hemos conseguido? - pregunto cogiendo a Blake de los brazos de Alex y mi pareja me anima a girarme - creo que Manuela se alegra más de la victoria que sus padres.
- Ojalá consigamos que Daniel puntúe en la siguiente - responde mi marido y yo beso su mejilla provocando que sonría - tú ya no te quejas tanto de coche ¿no?
- Si yo pude tú lo harás - aseguro y él me mira a los ojos - es un coche con el que vas a necesitar tiempo, pero seguro que conseguirás los puntos antes que yo.
- ¿Papi George podemos ir ya a comer? - cuestiona mi pequeño y yo asiento con mi cabeza - ¿puedo comer lo que quiera?
- Sí, pero nada de llenarse la barriga de dulces que nos conocemos señorito y luego se pone malito - aviso mientras camino con ellos - para la carrera que viene la tía Cara va a venir a cuidarte que me llamo anoche.
- No me habías dicho nada - se queja Alex en un susurro y yo me encojo de hombros sonriendo - tú y tu afán con las sorpresas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra Max:
- No ha sido tu culpa - aclaro y Daniel asiente con su cabeza antes de sonreír levemente - piensa que ahora los tienes compinchados para que hagamos cosas grandes así que a lo mejor el primer día que el coche no te de fallas vuelves a ganas una carrera.
- Tú serías el primero en dejarme pasar - contesta y yo sonrío antes de besar cortamente sus labios - ¿se puede saber por qué la has dejado sola trayendo el trofeo?, si es más grande que ella.
- Tu hija otra cosa no sé pero terca es un rato largo vida - aviso girándome viendo como Manuela caminaba de la mano de mi madre intentando traer con ella también el trofeo sin darse cuenta de que mi hermana la estaba ayudando - ¿cómo han pasado la carrera mis chicas favoritas?
- Pues hombre si no esperaras hasta el último momento para ganar lo hubiera pasado mejor - reprocha Victoria y yo ruedo los ojos divertido - ¿cuánto tiempo pasáis con la peque?, porque es extraño que la tengáis pegada a vosotros y todavía no haya empezado a tener vuestros ataques de no sé que.
- No se llaman no sé que - habla mi madre y yo hago una mueca dudoso - eso es la conexión especial que tienes con la persona perfecta con la que llegas a complementarte hasta llegar al punto de que ambos saben lo que necesitan y cuando lo necesitan que lo representen con ese no sé que solo es un ejemplo más de que a tu hermano si le afecto caerse de la cuna.
- Mamá - me quejo mientras Daniel se arrodilla riendo para abrazar a la pequeña - eso no era necesario, te hubiera quedado genial sino hubieras acabado así.
- Tranquilo Max, te seguimos queriendo así - anima Daniel y yo bajo la mirada hacía él antes de negar con la cabeza y sonreír - aunque a veces seas un cascarrabias.
