Obtener la mano del loto

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Lan Xichen sabía que la petición de cortejo sería difícil.  Pero no esperaba que tan difícil sería.
Se lamentaba no haberse preparado más para ello.
Se reprendía incontablemente. Por no haber llevado un dote, o algún hermoso obsequio para los líderes de secta.

El Líder Jiang expresó que no lo aceptaba.  Pero Madame Yu dijo un rotundo sí.  Sabia de antemano que la doncella Yanli estuvo muy de acuerdo.

Incluso Madame Yu les dijo que pasearan por los alrededores, mientras ella trataba de calmar a su esposo.

Con una sonrisa les dejo un momento a solas.

"No te preocupes" soltó Wen Zhou

"¿Disculpa?" Le miro confundido Lan Huan

"La reacción que tuvo el Tío Jiang es normal, bueno... eso según Madame Yu, ella siempre dijo que el Tío Jiang era muy celoso, pero jamás pude verlo, esta vez realmente confirme lo que ella dijo, asi que no te lo tomes a pecho Lan Huan" dijo A-Zhou

"Lo convenceré, de que tu estarás en buenas manos conmigo" dijo convencido Lan Xichen

"Tienes un gran trabajo por delante" le dijo sonriente A-Zhou

"Valdrá totalmente la pena" dijo sonriendo tomando la mano a Wei Zhou, besandole la mano con ternura.

Ambos caminaron sin rumbo por toda la secta, tratando de que al Lan se le pasaran los nervios. Pero no podía soportar no hacer nada. Tenía que pensar en lo que diría, tenía que planear todo, tenía que ponerse presentable para hablar ante el líder Jiang nuevamente, caminaron un largo tiempo, viendo el hermoso paisaje que les podía regalar Yunmeng Jiang. El olor a lotos era muy estimulante para su olfato, había logrado calmarle, eso y la dulce voz de su A-Zhou.

Pero había llegado el momento. Xichen había ido a dejar a Wei Zhou adentro de la secta, para el disponerse a ir a buscar al líder Jiang.

Lan Xichen había agarrado valor, preparándose mentalmente para encontrarse con el Líder Jiang.

Se sentía nervioso.
Las palabras que el tío Qiren le había dicho a través de cartas no ayudaba mucho.
Se sentía nuevamente nervioso.

Había arreglado más veces de las necesarias su túnica, como un tic nervioso.
No se sentía preparado. Pero anhelaba mucho obtener el permiso de él Líder Jiang.
Rogaba a los dioses que lo obtuviera.
Tenía que lograrlo.
Si no lo hacía era probable que no lo dejaran verse nuevamente con A-Zhou...

Y eso no podía pasar.
¿Cómo sobreviviría no verle?
¿Cómo pasaría sus días sin saber de él?
¿A quién le contaría su día o pediría consejo, cuando este al mando de la secta?
¿Ya no me dejarían ver al pequeño?

"¿Te quedarás ahí todo el tiempo o vas a pasar?" Había dicho la demandante voz del líder Jiang.

Lan Xichen ni siquiera había notado que había llegado a la oficina principal del líder Jiang.

"¿Y bien?" Insistió el líder

"Líder Jiang, yo realmente quiero a A-Zhou, el es una persona realmente inteligente,  valiente, y muy curioso con el mundo su curiosidad es muy bella, cuando se interesa en algo, investiga hasta saberlo, nunca le gusta quedarse con la duda, tiene un increíble don en el arte. Es hermoso y tiene un increíble don con los niños" relataba Xichen sonriendo bobamente.

Muy lindo, pero eso al líder Jiang no le ablandaba el corazón en lo absoluto, no permitiría que este Lan llevara a su loto.

"A Wei Zhou no le gusta la comida de tu secta, no le gusta las túnicas blancas, no le gustan las reglas, tampoco le gusta que le juzguen por su cultivo" recitaba Jiang Fengmian

"Lo sé, yo cocinaría para él, las túnicas que en tonos negros que usa podrá usarlas, yo seré el futuro líder de secta, nadie podría siquiera reclamarle algo a A-Zhou. Tampoco se le juzgaría. Todos en Gusu le aman y le admiran." Defendió Xichen

"No me agradas, lo veo en tus ojos, eres un ser lujurioso, ¡No permitiré que toques a mi loto! ¿Crees que no noto como lo miras? Le comes con la mirada, muchas reglas puedes tener en tu secta pero tienes una bestia interna. Y no dejare que caces a mi loto. Hasta aquí llego nuestra plática y punto" cello Jiang Fengmian.

Hechizo del Tiempo (Reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora