"Central Station"
es uno de los prostíbulos más famosos de uno de los barrios de Seúl, llamado así por ser el lugar central al que todos desean acudir, y Seungmin, por sus maneras tan sensualidad de bailar y sus buenos actos en la cama, es uno de lo...
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Los primeros dos años de ausencia, Seungmin lloraba constantemente exclamando cuanto extrañaba a su madre, Mary iba a su habitación cada vez que escuchaba al pequeño llorar y lo abrazaba y le cantaba hasta que el pequeño quedaba plácidamente dormido en sus brazos.
A la edad de trece años comprendió que jamás volvería a ver a su familia. Le gritaba entre llantos a Mary cuanto la odiaba por separarlo de sus padres, haciendo que la chica se sintiera culpable más no podía hacer nada porque ella solo obedecía órdenes e infinitas veces le pidió perdón a Seungmin entre lágrimas, esperando que el menor la perdonará algún día ya que le había tomado un cariño especial al niño, al igual que todos en aquella casa.
Seungmin estuvo encerrado en una casa en una de las zonas más prestigiosas de Seúl, Mary fue la encargada del pequeño durante siete años hasta que Seungmin por fin logró adaptarse a la nueva vida que lleva ahora, resignado a que jamás volvería a su antigua vida.
Su mente recordaba borrosamente la imagen de su madre, tampoco podía recordar con claridad a su padre y a Sungwoo, más siempre pensaba en ellos rezando todas las noches por volver a verlos.
Seungmin duró los siete años en la misma casa lujosa, le explicaron de ese nuevo mundo del que ahora era parte, conseguía dinero de maneras malas e ilegales pero que al final siempre valían la pena ya que gracias a esas acciones ahora podía disfrutar de esos costos gustos, más el menor jamás lo disfrutó completamente. No tenía permitido salir de aquella casa, ni siquiera al jardín, diciendo que afuera habían muchas personas malas que querían hacerle daño a Seungmin y a todos ellos, haciendo que el pequeño temiera porque aunque odia admitirlo, también le tenía afectó a la chica rubia.
Cuando cumplió la edad de quince años, Mary intentó negociar con el jefe, rogándole que dejarán al chico un tiempo más, pero la respuesta siempre fue no. Y Mary sabía que significaba eso.
Seungmin finalmente sería expuesto en Central Station.
Intentó de la manera más correcta explicarle al chico como es que sería su vida apartir de ese momento. El chico logró entenderlo pero no pudo evitar sentir miedo.
Unos días después, el señor Jung Hoseok, dueño de Central Station y el que comenzó todos aquellos actos ilegales, llegó a la lujosa casa y junto con Mary, se lo llevaron en dirección a aquel prostíbulo.
Le explicaron todo lo que debería hacer. Todos los actos que haría, la hora, como lo haría y que debería hacer después de eso. El chico comenzó a llorar debido al miedo y Mary inmediatamente corrió en busca de consolar al pequeño.
Él solo es un pobre ángel en este mundo de bestias.
Hoseok esperó que el chico terminara su llorar y lo miró por un largo rato, admitía que era un chico muy lindo, casi parecía un muñeco de porcelana.
- Vamos hacer algo... - Comenzó - Entiendo que eres virgen y realmente odio verte llorar, eres muy bonito y llorando ya no lo eres tanto. Así que voy a darte la oportunidad de que pierdas tu virginidad de una manera más... Decente.
