𝐌𝐒 ┃ Donde Murata empieza a enamorarse de una desconocida
O
Dónde Mikazuki vive con el peso de su pasado.
✶ A Murata fanfic!
✶ Actualizaciones lentas.
✶ Murata my beloved :(
✶ Murata x oc
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Al escuchar un sonido proveniente de los arbustos, la chica se preparó para atacar.
Dió un paso a la orilla del lago pero el demonio salió del agua dando un brinco.
— ¡Pero que linda chica! —dijo una demonio de piel azul marino con lunares rojos— ¿No crees, hermanito?
Tras hacer esa pregunta, de la misma forma y lugar, salió un demonio con piel roja y lunares azul marino.
— ¡Oh, claro que sí! ¿Que tal si la hacemos hervida?
Al notar como los demonios parecian ser hermanos, la chica sacudió los recuerdos de su mente para enfocarse en la pelea.
— No si corto sus cabezas primero —habló la chica haciendo el primer movimiento.
Saco su katana para posteriormente hacer un gran corte, sin embargo los demonios saltaron y los ataques fueron directo en el cuerpo.
Mientras los demonios saltaron el chico más alto, cargo su pistola y disparo en la cabeza de los demonios y su acompañante trataba de analizar dónde podría atacar.
Ambas criaturas se escondieron en los árboles que estaban en la pequeña laguna.
Murata se acercó a un árbol para atacar pero el demonio de piel roja desde otro árbol saco un chorro de agua caliente salió de su boca a presión hacia la espalda del chico, cuando el cazador reaccionó estaba boca abajo en el piso soportando el dolor.
— ¡Murata! —Yamamoto y se dirigió hacia el mencionado.
— Jajaja —el demonio rió— no le pasará nada, solo unas quemaduras un poco graves.
El menor de los Shinazugawa iba a acercarse pero un chorro de la misma manera impacto en su nuca pero era agua fría, casi hielo.
El ataque lo aturdió y por el frío, dejo de sentir la nuca y unos dolores en la cabeza se presentaron.
Mikazuki al no saber que hacer con sus compañeros, el demonio de piel roja lanzo un chorro de agua caliente y como pudo recolectó un poco entre sus manos.
Rápidamente coloco un poco de agua caliente a Genya en su nuca y hacer lo mismo para Murata pero con agua tibia.
Ambos demonios se sorprendieron al ver qué la chica no se veía afectada por la temperatura del agua.
En lo que se aliviaban, saco su katana para perseguir a los demonios. Se acercó al de piel roja pero le lanzó un chorro de agua hirviendo, sin embargo, siguió persiguiendolo hasta que pudo cortar su cabeza.
Ya iba para el otro demonio cuando vio la cabeza de este rodar y ver a Shinazugawa y a Yoshida de pie. Vio la cabeza de ambos demonios, los dos lloraban y alcanzó a oír una oración que la dejó marcada.
