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Abril 2029
Eclipse se había reunido en la casa de Sumin para hablar sobre el regalo para los fans en el que habían pensado: lanzar una canción todas juntas después de años. Tenían muchas ganas de ver sus reacciones, ya que, como en una semana el grupo cumplía su décimo aniversario desde el debut, querían darles algo tras los casi tres años que habían pasado desde su separación.
Al cumplir los siete años como grupo, las cinco decidieron no renovar su contrato, para ellas era el momento en que cada una se fuera por caminos diferentes, que cumplieran sus sueños, pero sin olvidar nunca todo lo que habían vivido juntas.
Sumin había decidido centrar su carrera en ser actriz y compaginar sus rodajes con algún proyecto como modelo para cualquier marca; Jisu se había quedado en PNation, convirtiéndose en compositora de canciones para nuevos grupos; y Hana se había vuelto presentadora de un nuevo programa de variedades. Eunji y Haru eran las únicas que habían seguido su vida como idols, pero esta vez como solistas.
Para ambas fue difícil al principio, porque aunque ya habían empezado a serlo mientras continuaban en Eclipse, les era extraño no tener al resto de las miembros a su lado, aunque fuese en los backstages.
Con el paso del tiempo, las cosas habían mejorado para la joven. Mucha gente había olvidado todo lo relacionado con su escándalo, los netizens habían comenzado a aceptar su relación con Han, y aunque siempre había los que les criticaban, diciendo que no eran profesionales, ninguno de los dos le daba importancia. Para ella su carrera no podía ir mejor.
También su amistad con el resto de las perdidas se había fortalecido. Las siete se habían vuelto como una familia para ella, una en la que sabía que podía confiar y sentirse cómoda. Cada una tenía su vida, pero siempre sacaban cualquier oportunidad para verse, y si no podían, intentaban hablar por el grupo que tenían.
—Estoy demasiado emocionada —admitió Hana mientras se movía de un lado a otro, poniendo nerviosa a Jisu, que la miraba con los ojos entrecerrados.
