In the other life (Xiaoven)

|Capítulo 2|

Las noches en vela no eran algo que le ayudara. Su vida se veía entrecortada muchísimas veces por el sueño y como estudiante eso le afectaba. Dichoso el día en que aquel sueño llegó a su vida para atormentar cada una de sus noches.

Era de día, sábado por la mañana, había salido con sus amigas y en su mente solo existía dos cosas: El sueño que seguía repitiéndose y el día anterior en el museo con aquél extraño joven.

-¿Venti? ¿Estás bien? - una mano se posó en su frente como si le estuviera tomando la temperatura. Él guió vagamente sus ojos hacia una chica de cabello oscuro recogido en dos largas coletas. El chico le tomó la mano y se la bajó, quedándose mirando a su amiga.- ¿Qué te pasa?

-Tengo sueño.- el llamado Venti aún sumido en sus pensamientos siguió caminando hacia el bar donde desayunarían. Sus amigas le siguieron y se pusieron a su lado. Dos de ellas eran rubias, la otra era la chica ya mencionada.

-¿Aún sigues con ese extraño sueño? - preguntó una de las rubias, con ojos verdes y ropa morada.

-Sí, el mismo de siempre. Aunque hoy pude ver más, no me despertaba en el grito...Esta vez pude ver morir al otro sujeto, no sé si prefiero que eso pase...- el joven de trenzas se paró y guió sus ojos hacia abajo, volviéndose a quedar pensativo.

-Algo me dice que no es solo ese maldito sueño el que te tiene así.- la de cabellos oscuros puso sus manos en la cintura y se asomó para verle.- Vamos Venti, cuéntamelo.

El silencio se apoderó de aquella situación y los ojos preocupados de sus amigas solo le creaba más tristeza aún. Él no era así, no era tan callado, tan reservado...Sentía tanto tener que estar de esa forma.

-Ayer...- Venti se sentó en un banco y tomó del brazo a cada una de sus amigas para que se sentaran a su lado.- Conocí a un chico y antes de que digáis nada voy a contaros...Bien pues, ambos estábamos viendo mi cuadro favorito, ya sabéis, "Alatus salutis" o "las alas de la salvación" en español . Todo estaba bien, el chico era muy amable y me cayó muy bien. Pero dijo algo que...me dejó confundido.

-Oh dios.- la última chica, rubia con ojos azules, dió un pequeño gruñido.- ¿Te insultó? ¿Te hizo sentir mal?

-No, Bárbara, espera.- le respondió mirándole con seriedad.- "He venido aquí porque tuve un extraño sueño que me recordó a estos dos." Eso me dijo.

-¿Y?

-Ahí está la cosa, Mona. Mis sueños también tienen relación con los personajes que se muestran en el cuadro.

-Oh dios santo.

-Vaya...Par de raritos.

-¡Fischl!

-¿Qué? Es la verdad. - esta se encogió de hombros y miró a su amigo, que realmente parecía preocupado. Ella se sentó a su lado y suspiró.- Perdón, no quería reaccionar de esa forma.

Venti la estrechó entre sus brazos y dió una leve carcajada, negando con la cabeza a su vez.

-No te preocupes. Es normal reaccionar así, es algo raro, pero tal vez solo es casualidad.- se separó y miró a Mona, la cual no estaba muy satisfecha con las palabras de su amigo.

-Sabes lo que opino yo sobre estas cosas.- se llevó una mano a la barbilla mientras que la otra se posaba en su cintura.- El destino, la historia contada y la que está por contar...Sabes que es algo a lo que me aferro. Que lo creas o no es otra cosa, pero no creo que esto sea pura casualidad.

-Tampoco es para tanto.- Venti se levantó quitándole completa importancia al asunto. ¿Cómo se le daba tan bien cambiar de tema y de parecer? - Vamos a ese bar, necesito un trago.- se estiró y bostezó, empezando a caminar hacia el lugar.