Un universo alterno donde Shun de Andrómeda ha sido teletransportado a un mundo retorcido, donde no posee magia o recuerdo alguno, por lo que deberá averiguar quien es, al mismo tiempo descubrirá este país de las maravillas y los misterios que escon...
Sus ojos se hallaban cerrados, parecía haber sido inducido en un sueño profundo, más a pesar de ello podía escuchar el sonido de los cascos de un caballo, al igual que las ruedas de un carruaje resonando por un tiempo hasta que despertó en un lugar lleno de una densa oscuridad la cual no podía permitirle siquiera ver su propia nariz, también se había percatado de que se hallaba en un lugar muy angosto, donde apenas podía darse la vuelta, en ese momento su mente fue invadida por una fuerte sensación de miedo y horror indescriptibles.
¿Donde estaba?
¿Qué era aquel lugar?
¿Porque era tan angosto?
¿Era un sueño?
Y más importante...
¿Quién era el?
Su mente comenzó a llenarse de preguntas, cada vez más y más desconcertado, hasta que comenzó a golpear frente a el una y otra vez.
-¡A-Ayuda! ¡¿Hay alguien ahí?! ¡Hola! -
Suplicando por ayuda logró escuchar como se producía un sonido similar a la madera, pensando por un momento que pudo haber quedado atrapado en algún tipo de almacén o algo parecido por lo que siguió golpeando y llamando por alguien cuando sintió algo peludo moverse cerca de su pierna, comenzando a entrar en pánico, quedándose quieto, analizando de qué podría tratarse aquel objeto, comenzando a sentir como era que la temperatura comenzaba a aumentar en el lugar, pasando de frío a calor en cuestión de segundos, cosa que llamó la atención del chico, haciéndolo sentir sediento.
-(¿Por qué, comenzó a hacer tanto calor de repente?...) -
Pensó por un segundo cuando observó una pequeña chispa de color azul en el lugar, la cual de repente, se encendió, provocando llamas de una tonalidad azul, la cual logró abrir el lugar, haciendo que aquel joven saliese de allí asustado.
-¡¿Fu-Fuego?! -
Exclamó, dándose la vuelta para ver donde se hallaba cayendo de espaldas logrando observar un gran ataud negro, con detalles dorados que mostraban figuras semejantes a estrellas, aves, entre otros, teniendo en el centro una forma ovalada semejante a un cristal del cual resplandecía de una tonalidad verde casi azulada, y centímetros debajo de esta una gran cerradura, en ese momento su mente se llenó de aún más preguntas.
¿Estaba muerto?
¿Qué era ese lugar?
¿Qué estaba pasando?
- (Seguramente... Esto debe tratarse de un mal sueño... Sólo, sólo debo despertar) -
Pensó cuando pudo notar detrás suyo a una gran cantidad de personas encapuchadas, las cuales parecían estar murmurando tras ver salir del féretro a un chico de cabellera castaña rojiza, de piel clara, de no más de 1.65 de altura, con finas facciones androginas, el cual iba vestido con una armadura rosada con detalles dorados la cual cubría gran parte su cuerpo con excepción de parte de los muslos, brazos y cabeza, todos murmurando por aquella forma tan extraña de vestir pero quienes parecían más interesados en el suceso eran los chicos que se hallaban sentados en la parte delantera del lugar.
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