Capítulo 1: Que hable tu espada

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Era una noche tranquila, la mar estaba en calma, ronroneando con su oleaje como de costumbre, y el destello de la luna resaltaba parte de la cubierta del barco, justo la zona en la que se encontraba Barbanegra, con rostro cansado y amargado, medio...

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Era una noche tranquila, la mar estaba en calma, ronroneando con su oleaje como de costumbre, y el destello de la luna resaltaba parte de la cubierta del barco, justo la zona en la que se encontraba Barbanegra, con rostro cansado y amargado, medio ebrio, apoyando el antebrazo en una de las barandillas de proa, y al final de su mano, reposando, una botella de ron a medio beber.

Era otra maldita noche infinita, acosado por el insomnio y el desconsuelo, el resto de la escasa tripulación dormía en el interior de algún camarote o bodega.

Pero, entre la oscuridad del océano, observó algo que perturbaría ese momento. Había un bote de remos, con alguien en su interior, acercándose al barco.

''¿Qué cojones?" Pensó en su cabeza el capitán y agarró un telescopio para intentar adivinar de quién se trataba, cuando lo vio con claridad algo dentro de él cambió. Dejó el catalejo de un golpe y desenfundó su espada. En silencio, esperó a que el "desconocido" subiera, tranquilamente, para tenderle una emboscada.

Una vez el hombrecillo misterioso puso ambos pies en el barco, una afilada y desgastada espada le apuntó a la cara, con voz rasposa y seca, Barbanegra habló.

-¿A qué has venido, Stede?

El rubio alzó ambas manos en signo de rendición, hacía bastante tiempo que no veía a Ed, y tenía sentimientos encontrados, trató de usar las palabras adecuadas a continuación.

-Necesitaba... verte. Hablar contigo. Te debo una explicación, no podía dejar las cosas as-Fue interrumpido por la espada del contrario, que en un ágil movimiento la apuntó a su cuello.

-Vete de mi barco.

-Bueno, técnicamente éste también es mi barco, así que...

-Vete de una puta vez si no quieres morir.- La mirada de Barbanegra se tornó oscura y arisca, más de lo que ya estaba, empezaba a perder los nervios.

Stede niega repetidas veces con la cabeza, con una mirada seria y decidida.

-No voy a irme, no puedo. No sin hablar, de explicártelo todo y de disculparme. Después haz... lo que quieras.-Suspira, tratando de no perder las formalidades.

Edward se aleja un momento y agarra la botella de ron, que hacía unos minutos había aparcado no muy lejos.

-¿Quieres hablar? ¡De acuerdo! -Enfatiza moviendo los brazos- ¡Hablemos! - Le da un trago a la botella de ron.

Vuelve a retomar la conversación Barbanegra.

-Empezaré yo, ¿Qué tal se vive siendo un gusano traidor y mentiroso?

-S-si, bueno, respecto a eso yo-Le interrumpe el barbas, para seguir hablando él.

-O mejor dicho, ¿Cómo tienes la puta cara de tomarme por estúpido, jugar con mis sentimientos y al cabo de meses presentarte aquí para "charlar" tomando un té?

Ship in a bottle (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora