¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
•ʏᴜᴜᴛᴀ ᴏᴋᴋᴜᴛsᴜ•
NARRADORA POV.
Mako miro una vez más la ventana de su habitación, sintió la brisa fresca de la mañana mover sus despeinados cabellos azabaches. Saco un cigarrillo de su boca al recordar aquellos días, antes de que conociera a la preparatoria de hechicería y a sus amigos.
Cuando recordabas aquellos años siempre lo ponía de malas. Tomo entre su dedos fríos el cigarrillo y soltó el humo retenido en su boca. Los ojos de distintos colores del peli-negro se desviaron al pequeño chico que dormía plácidamente a un lado de el.
Sintió como Toge lo abrazaba en busca de calor.
—Es demasiado hermoso —pensó Mako admirando a su pareja dormir, mirando aquellos símbolos de su ritual que amaba, realmente se veían tan perfectos en Toge—
Anoche el de cabellera azabache quiso dormir con el, quería que los recuerdos se fueran y Toge era el único que podía sacarlo de esa realidad, el único que lo hacía sentir seguro.
—Hey, despierta —hablo Mako con suavidad mientras despeinaba aún más sus cabellos rubios grisáceos—
Toge se movió y fruncio ligeramente su ceño cuando sintió el olor a tabaco, no le gustaba que el chico fumará.
—Okaka —soltó en desacuerdo y aún con sus ojos cerrados—
—Ya, ya. Lo siento —hablo Mako apagando su cigarrillo en el cenicero que tenía aún lado, Toge parecía conocerlo demasiado bien para comprar un cenicero—
Mako se acostó aún lado de la cama y sintió como Toge lo abrazaba aún con más fuerza, ocultando su cara en su pecho.
—Tenemos que levantarnos —hablo Mako con voz roca porque acababa de despertar—
El de cabello azabache abrazo a Toge para proporcionarle calidez.
—Atun con Mayonesa —soltó Toge—
Toge levantó la mirada y admiro el rostro del chico, sonrió y llevo una mano ala mejilla de Mako, justo donde estaba aquella cicatriz, Mako miro hacia abajo, le desagradaban aquellas cicatrices.
—Hay que levantarnos~ —susurro, ahora Mako era quien se ocultaba en el cuello de su novio— O Maki nos golpeará otra vez
Toge sabía perfectamente el porque Mako no le gustaban sus cicatrices, sin embargo el peli-negro se estaba aceptando poco a poco, con su ayuda.
