Mis Donceles y Yo II La Otra Tierra y el Poder del Dragón

Capítulo 19

- ¿Lo sabes? – pregunto Naoki curioso

- Dilo Tetsu – hablo Issei

- Si, queremos saber – hablo Aki

- Bueno... creo que es por mi culpa – decia Tetsu tocandose las manos algo nervioso y los demás lo notaron

- ¿Por qué lo dices? – volvio a preguntar Naoki

- Pues pienso que se debe a mi deseo – respondio Tetsu

- ¿Qué deseo pediste?

- La verdad... pedi el deseo de que los varones pudieran aceptar mejor a los donceles y los trataran a todos por igual

- ¿Quee?

- Eso fue lo que pedi

- Hmm algo me decia que pedirías algún deseo así, pero no se te cumplió, no hay donceles

- Exacto, yo no pedi que se desaparecieran los donceles, pero tal parece que se cumplió mi deseo de esta forma... al igual que te paso a ti con tu deseo

- Entonces tu deseo hizo que todos los donceles fueran varones – dijo Issei

- Así ellos serian tratados por igual – termino de decir Aki

- Si, creo que es así – dijo Tetsu

- Ahora entiendo – dijo Naoki

- No te sientas mal Tetsu – dijo Issei – No es tu culpa

- Gracias Issei – Tetsu le sonrio un poco

- Pero... ¿nosotros que somos? – pregunto Aki

- ¿Ah? – Naoki lo miro

- ¿En esta época somos varones o donceles?

- Es una buena pregunta Aki – dijo Tetsu

- No lo sé pero para mi ustedes siguen siendo donceles – respondio Naoki

- Claro... para que nos sigas tratando de forma inferior a ti ¿no? – dijo Tetsu cruzándose de brazos molesto

- Por supuesto que no! – Naoki miro a su primer esposo – Son mis esposos donceles, eso no cambia las cosas, ni aquí ni en ningún otro lugar!

- ¡Ah ya sé! – Aki dijo animado

- ¿Qué? – quizo saber Tetsu

- Si nos excitamos y se nos moja la parte de atrás, eso quiere decir que seguimos siendo donceles! – explico Aki con una sonrisa

- Amm ¿Qué fue lo que dijo? – pregunto Hirochi con expresión de asco en su mirada

- Ay Aki... - decia Issei

- Hmm... - Tetsu pensaba – Aki tiene un buen punto, pero...

- Me daría pena averiguarlo y decirlo – dijo Issei

- Jajajaja – rio Naoki – Solo a Aki se le ocurren esas ideas

- Oigan, ahora que ya saben que paso... o eso parece, ¿podríamos irnos de aquí? – hablo Hirochi

- ¿Irnos a donde? – pregunto Naoki

- Pues no se... ¿a mi casa?, muero de hambre

- Mm nosotros no hemos comido desde la mañana

- Cierto, yo también tengo hambre – dijo Aki

Naoki miro al cielo y noto que faltaba poco para el atardecer, no necesitaba saber la hora para averiguarlo