𝖀𝖓𝖆 𝖉𝖊 𝖒𝖎𝖑 𝕬𝖛𝖊𝖓𝖙𝖚𝖗𝖆𝖘

Capítulo 44 ✞ Asalto Escarlata ✞

🦇🖤

-¿Crees que haya sido buena idea alejarnos de los demás?- preguntó Elayne

-shh, estamos cerca- dijo Oske

Ambos estaban con el grupo, pero Oske había visto a torito caminar solo por el bosque y no dudó en seguirlo. La bardo se había dado cuenta y quiso seguirla para ver que hacia... ahora las dos estaban solas tratando de atrapar una rata.

-shh ahí esta- susurró Oske- rápido, dame lo que traes para atraparlo

Elayne miró a todos lados, no sabia que darle, hasta que...

-bueno que espe- fue interrumpida

-¡toma!- levantó a su cachorro

-¿Qué es eso?

-es mi huargo cachorro- sonrió

-no si, pero ¿para qué sirve?

-¿Cómo qué para qué sirve? es mortal, y créeme me ayudó a escapar de un vampiro psicópata

-y no le va a hacer ningún daño ¿verdad?

-aah muy probablemente si

-bueno como no me voy a preocupar, se supone que ustedes lo quieren de vuelta ¡y yo también!

-okok le voy a decir que no lo lastime

-bueno esta bien- dijo dándose vuelta, pero otra vez volteo a ver a la bardo- pero nada más le pasa algo y al quien quiebro es a ti eh

-okok... no lo lastimes- le susurró a su cachorro dejándolo en el suelo

-¿Lista?... ¡ahora!

-¡vamos! 

Mientras tanto en otro lugar.

Varios sobrevivientes iban junto a Mario, se dirigían para rescatar a Mary flower la cual estaba oculta bajo tierra... en un escondite.

-los escudos defienden corazones. Aun sin tu aspecto y tu armadura ¡eres más fuerte de lo que piensas!... si sangran los llamare hermanos y hermanas. Avancemos, la lanza solo apunto hacia una dirección. Golpea ahora ¡golpea más fuerte!... se enfrenta a un nombre ¡GRITEN GUERREROS! ¡MÁS FUERTE!

.

.

.

.

.

-los escucho...

-parece que tenemos compañía...- dijo vampiresa dando una sonrisa 

.

.

.

.

.

-cuantas veces debo morir... antes de aprender a vivir... que este día sea legendario- dijo Mario con heridas en su rostro, luego de haber peleado con la vampiresa, la cual solo se fue del camino... por ahora 

-¡Mario! ¡ve a rescatar a Mary, rápido!- gritó Leslie

Mario limpio el sudor de su frente y fue a buscarla, al llegar la encontró sentada en una silla cantando una canción que se le hacía conocida. Reguló su respiración y comenzó a cantar con ella.

-¿Quién está ahí?- preguntó, al escuchar una voz que no conocía 

-te desataré- agarró un hacha que tenía y comenzó a cortar la cuerda- solo no te asustes al verme... tal vez seré yo el asustado- se incorporó nuevamente al ver que la guerrera se daba vuelta