Cumplir años no era la gran cosa, Bakugo no entendía porque todos se emocionaban cuando sus cumpleaños se acercaban, desde qué era un niño solo lo vio como un día más, era solo un número, no reflejaba su madurez real; cuando cumplió diez le pidió a sus padres qué dejaran de celebrarlo, así qué solo se reunían a comer juntos, era importante para sus padres así qué mantenía la promesa de comer con ellos a pesar de estar ocupado con la escuela o las prácticas.
Este año había una "cosa" levemente diferente en su cumpleaños. Solicito un permiso de ausencia a la escuela para poder ir con sus padres, llevaba una ensalada y un pastel qué le dio Sato, debía admitir lo bien qué le salían los postres al "idiota del azucar" y el camino en tren era de lo más pacifico, era temprano y se estabanalejando del centro de la ciudad por lo qué no había demasiada gente.
—¿Estás nervioso?
El chico a su lado le sonreía como si quisiera opacar al maldito sol.
—Claro qué no
Bakugo sintió un fuerte agarre en su mano, Kirishima estaba usando ligeramente su kosei en la mano qué lo sostenía
—Estas sacando pequeñas chispas, tranquilo yo te cubro.
De nuevo aquella sonrisa qué hacía qué Bakugo quisiera tanto besarlo como golpearlo, cuando estaba a su lado era un mar inmenso de sentimientos.
—Claro qué lo haces —se burló con sorna. —Solo vamos a ir a comer con mis padres por mi cumpleaños, nada más.
—Y ellos me van a conocer.
—Ya te conocen —se apresuró a decir. Había presentado al pelirrojo a sus padres como el amigo qué le ayudó en Kanto.
—Pero no así —Eijiro alzó ligeramente las manos qué aún estaban unidas.
—Conocés a mi madre, va a gritar demasiado cuando sepa qué no tendrá descendencia.
—No creo qué lo tomé a mal.
—Aunque eso pasé, gritará.
Kirishima solo rió de nuevo, sabía qué eso siempre calmaba a Bakugo, de la nada un tenue tarareo salió de su boca mientras jugaba con los dedos ajenos, Karsuki se lo permitió.
—¿Qué quieres de regalo?
—Ya me diste un regalo.
Eijiro le había regalado un saco de boxeo muy parecido al qué tenía él en su habitación.
—Para el próximo año entonces
—¿Seguiremos juntos el próximo año? —la pregunta sonó muchísimo más insegura de lo qué le habría gustado al rubio.
—El próximo, y el próximo, y el qué sigue de ese, y el qué sigue y el qué sigue del qué sigue —el pelirrojo activo un poco su kosei por el nerviosismo. —Al menos eso espero.
—Seguro me saldrán arrugas primero qué a tí, tienes cara de maldito bebé.
Kirishima se rió ante sus palabras, y para sorpresa de ninguno Bakugo le siguió
—Solo hay una forma de comprobarlo.
—Tienes toda la maldita razón.
Subo hoy los últimos días porque tendré una semana muy ocupada y quizá no pueda hacerlo después, de todos modos ya los tenía preparados.
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KiriBaku week 2022
FanfictionDía 1: mascotas / comida Día 2: ciencia ficción / cuento de hadas Día 3: AU oficina / video llamada Día 4: noche de película / día lluvioso Día 5: clandestino (no estoy realmente segura qué quiere decir esto) / un día como Pro Heroes Día 6: día de...