(xii)

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Porque así es Minho.

Frente al deber de lidiar verdaderamente con sus propios sentimientos y emociones, hace lo que siempre hace: evita hacerlo.

Pospone tener una conversación adecuada con Jisung y vuelve a reducir el tiempo a solas con él. Minho asume que triunfa en ello ya que apenas tienen tiempo libre, lo que le da la excusa de estar frecuentemente cansado.

Frente a los demás, Minho continúa jugando como siempre con Jisung; le gruñe como de costumbre, y permite que se burle de él sin muchas consecuencias. Sin embargo, es divertido, porque incluso cuando Minho está evitando activamente estar a solas con Jisung, sus bromas naturales permanecen y continúan combinando muy bien juntos; Minho no está seguro de si eso le agrada o lo enoja.

Algunas veces, encuentra a Jisung mirándolo herido y confundido, pero esas veces actúa sin decir lo que realmente quiere decir y con pequeñas sonrisas de disculpa, promete en silencio un "la próxima vez".

Y luego sucede aquello, esa noche, varias semanas después del nuevo año.

Cuando llega al dormitorio, descubre que sólo Jeongin está en casa. Acaban de acabar con algunos conciertos de su gira, así que por una vez se les ha permitido algo de espacio para respirar.

Sabe que Chan y Changbin todavía están en el gimnasio, donde los dejaron. Habían llegado de su sesión una hora después que Minho y Woojin, así que incluso después de que les anunciaran que cenarían y se irían a casa, Chan y Changbin optaron por quedarse.

Mientras tanto, el cuarteto de adultos nuevos (00' line), según Jeongin habían decidido salir y hacer algunas cosas de 'adultos', sólo porque finalmente pueden hacerlo.

- Creo que eso significa que salieron a beber.- Dice Jeongin con una expresión despreocupada.

- ¡¿Mánager Hyung los dejó?!.- Pregunta Minho, sorprendido y bastante preocupado.

Jeongin solo se encoge de hombros, lo que frustra a Minho, pero con nada más que hacer se queja por lo bajo, decide que si nadie más está preocupado, entonces él tampoco debería estarlo.

Se las arregla para alejar a Jisung de sus pensamientos, al menos hasta muchísimo más tarde.

Es un poco más de la una de la mañana y él se está lavando y preparándose para irse a la cama, cuando alguien comienza a golpear fuertemente la puerta del baño.

- ¡¡Abran!! ¡Necesito orinar!.- Es Jisung, y suena bastante desesperado mientras golpea repetidamente la madera, y Minho, que de todos modos sólo se está cepillando los dientes, se rinde y abre la puerta.

Los ojos de Jisung se agrandan después de empujar y ver quién está adentro. Minho es el primero en apartar la mirada, volteándose hacia el lavabo para poder escupir la espuma de su boca; el contacto visual se rompe, Jisung no duda en pasar corriendo directo al baño para que pueda hacer sus necesidades.

El fuerte ruido de la orina de Jisung casi hace reír a Minho y lo distrae de terminar rápidamente lo que está haciendo. Está haciendo gárgaras con agua cuando Jisung se une a él en el fregadero; sus codos se tocan cuando el menor se mueve para lavarse las manos, y es algo tan simple, pero ha pasado tanto tiempo desde que estuvieron solos y en un espacio tan pequeño, que Minho inmediatamente se puso en guardia.

Sus ojos se encuentran a través del espejo, y de repente la tensión en el aire se siente eléctrica.

- Buenas noches...- Murmura Minho mientras vuelve a colocar su cepillo de dientes en su lugar; el plan es darse la vuelta rápidamente y salir del baño mientras Jisung está enjabonándose las manos, pero se detiene inmediatamente cuando escucha al joven susurrar suavemente.

#gravity ;; minsung [traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora