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Capítulo con violencia sexual, se recomienda discreción
...

Toji Zen'in...

¿Qué quería en realidad? ¿Por qué estaba tan obsesionado con la pobre y delicada Lila Sweet?

Si bien él podría conseguir a cualquier mujer que quisiera ¿Por qué no dejarla en paz?
Para eso había que viajar al pasado

Por una perra llamada Marie Howard

Cuando apenas era un niñato creciendo junto a los desgraciados Zen'in, vivió muchas cosas y presenció otras que no iban de acuerdo con su edad, haciéndolo crecer y madurar antes de la cuenta

Pero... una mujer, una de bonitos ojos verdes y cabello tan oscuro como el azabache junto a una preciosa piel tan cuidada como la fina porcelana

Una mujer tan delicada y amorosa que lo hacía dudar del hecho de saber si un ser humano así podía existir. Él tenía tan solo 14 años y ella 23, toda la dulzura y encanto que uso en él fue tan hipnotizante y mágica que lo llevo a hacerse su primera masturbación

Creció con la imagen de esa mujer y mágicamente se dio cuenta de lo mucho que le gustaban las mujeres tan femeninas, todo bastante "normal"

Claro que nunca espero ver como su padre se la follaba como una maldita perra del montón, no espero ver como la azotaba con fuerza mientras le decía que era la zorra más sucia, no pudo con la imagen, fuese bastante shockeante

La imagen de su primer amor siendo humillada y disfrutando de eso. Por una parte, se le rompió el corazón no solo por ver a la dulce Marie tragando de la polla de su padre, sino que también pensó en lo devastada que su madre estaría si se enterara que su Papá se cogía a la niñera

Pero el segundo sentimiento que desarrollo al ver a su padre maltratando y lastimando a aquella muñeca de porcelana fue más grande, fue excitación pura ante algo tan desagradable, fue tanto así que jamás pudo volver a excitarse con otra cosa

Disfrutaba ver de la humillación para correrse, para sentir placer y para complacerse

Desde ahí se dio cuenta de que no sería una persona normal jamás

Sin embargo, no le aterro, paso los mejores años de su vida sometiendo a cuantas mujeres podía, porque claro que era consciente de su belleza y lo que provocaba en las mujeres hasta que claro conoció a la madre de Megumi

Ella era una mujer llena de vitalidad, bastante distinta a lo que acostumbraba "consumir", una mujer que si bien era huérfana podía valerse por sí misma, el cambio tan abrupto de tipo de mujer lo dejo hechizado por lo que no dudo en hacerle un bonito bebé para tener una familia

Claro si tan solo Gojo Satoru no se hubiera metido en la relación, jamás habría terminado con ese destino, pero suponía que era lo mejor para ella

Hasta que la muerte los separé dicen por ahí

Paso muchos años follando a cuanta mujer se le ofreciera, no tenía de otra pues perras sumisas eran cada vez más escazas con las nuevas generaciones y sus estúpidas olas de tener la autoestima alta

Sin embargo el destino le sonrió cuando su pequeño mocoso realizo una fiesta para atraer a la perra que le gustaba, fue cuando la vio

El fantasma de Marie metido en esa mocosa. El mismo cabello azabache, la misma piel blanca y fina como la porcelana, las mismas actitudes serviciales y encantadoras, esa chica irradiaba dulzura e inocencia, solo cambiaba el color de los ojos.

Aquella chica tenía unos encantadores y preciosos ojos azules que podía sentirse hundir en ellos

Pero podía ver la necesidad de atención, la atención que pedía a gritos

Last Night- Toji FushiguroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora