Real Blood | Wyatt Lykensen | Libro 2 [PAUSADA]

Nuevas experiencias

Tres meses habian pasado desde que me fui con Marcus, y mi vida se habia vuelto una mierda.

Entrenamiento diario, horas bajo el sol, la comida apestaba.

Marcus trataba de convencerme de que todo habia sido por mi bien... claramente no lo era.

Trato de pasar tiempo conmigo, insistiendo en que debiamos de tener ratos padre e hija, pero, ¿que clase de padre secuestra a su supuesta hija, la hace entrenar hasta el cansancio y la separa de lo que mas ama en esta vida? Al parecer, el mio.

Me encontraba entrenado cuando su voz me detuvo.

—¿Ya consigues dominar esa espada? —pregunto Marcus con una sonrisa algo tenebrosa.

—Por supuesto que si —le conteste.

—En ese caso —su sonrisa se ensancho un poco mas —Ben —voltee mi mirada hacia atras de mi, ahi se encontraba un chico de unos 19 años, de cabello un poco largo y obscuro, era Ben, el chico que habia hecho que mis dias aqui se volvieran un poco mas tediosos de lo que eran en realidad, no lo soportaba y eso que soporte bastante a las personas.

—¿Que hace aqui? —pregunte.

—Quiero que tengas un duelo con el.

—¿Duelo? ¿En serio?

—Asi es, quiero saber de que eres capaz, ademas de lo que vi en la pelea de hace meses.

—No lo hare —dije segura.

—¿Tienes miedo? —dijo Ben —¿Acaso temes perder contra mi? —tenia una sonrisa orgullosa en el rostro, cosa que mi hizo enfurecer.

—No, no tengo miedo —intente sonar lo mas segura que pude, a decir verdad si estaba un poco asustada, o mejor dicho intimidada por la mirada de Ben —Solo no tengo nada que probar.

—Lo sabia —rio Ben —Eres una cobarde.

Mi sangre se calentaba cada vez mas —No soy una cobarde.

—Entonces demuestralo —levanto su espada —pelea conmigo... princesa.

Rapidamente levante mi espada y lo ataque, el se cubrio facilmente de mi ataque logrando que nuestras espadas chocaran y luego, me dijera un golpe en la cara con la empuñadura de su arma, provocando que mi labio inferior se cortara y comenzara a sangrar.

—Eso si es tener coraje princesa —Dijo bastante orgulloso de si mismo.

—No me digas princesa —Volvi a lanzar un ataque conmenzando ahora si el duelo.

Los golpes y espadazos seguian y seguian, logre herirlo varias veces, asi como el a mi.

A este punto, ya teniamos a una notable multitud alrededor de nosotros.

Para los golpes finales, yo ya tenia una herida superficial en el brazo, y el, una mas grave en el abdomen. Si, este duelo fue sin armaduras o alguna proteccion.

Lance los ultimos golpes pero mis piernas me fallaron en el momento en el que recibi un impacto de el, cayendo al suelo.

Solo podia mirar como el, parado frente a mi, me apuntaba con su espada justo en el cuello, con una sonrisa arrogante en su rostro.

—¿Te rindes? —me quede callada —lo sabia.

Dejo de apuntarme con su espada y se dio la vuelta.

Grave error, Ben.

Con mis piernas enrosque las suyas y tire de ellas, provocando que cayera de espaldas, momento que aproveche para subirme en el para inmovilizarlo y colocar mi espada en su cuello.