Cada quien ama una película, ya sea por su historia, personajes e incluso modo de animación ¿no es así? A tal grado que crees que es la mejor película de la historia.
E incluso, en varias ocasiones, queremos vivir la historia en carne y hueso, pero...
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Mientras caía por ese hoyo sentí como si cayera en la misma oscuridad.
Desperté para ver enfrente de mí a siete personas que sentía que ya había visto antes, mientras que el mundo parecía que se estaba revirtiendo el efecto un papel quemado.
Uno de ellos estaba en algo que parecía un podio, me levanté algo confundido. ¿Por qué el hoyo me llevó hasta aquí?:
–Agatha Prenderghast– empezó a hablar el que estaba en el podio –de la provincia de su majestad de Massachusetts, en este día has sido enjuiciada por el horrible crimen de la brujería– ¿qué? –atestiguada por aquellos cuyos testimonios han sido escuchados. Por lo tanto, esta corte, te declara culpable.
–¡No!– dije al escuchar esto
–Y la pena que se dicta de acuerdo a tus horribles crímenes es la ejecución.
Empecé a escuchar que alguien lloraba, al ver detrás de mí vi a una niña, de unos once años, cabello negro largo, ojos azules... se parecía un poco a Cynthia. Tenía sus manos encadenadas:
–No... ¡no!– dijo mientras lloraba
–¿Tienes algo que decir en tu defensa?– dijo el juez
–Yo solo estaba jugando– dijo llorando viendo al juez
–Sí. ¡Con fuego! ¡Estabas hablando con los muertos!
¿Qué? Entonces... ¿ejecutaron a una niña de once años que no tenía nada que ver con la brujería... solo porque también podía ver a los muertos?:
–¡Esperen! ¡No!– traté de detener a las otras seis personas que se estaban acercando a la niña que tengo entendido que se llama Agatha
–No arriesgaré a estas buenas personas a sufrir una maldición– continuó hablando el juez
–¡No! ¡No pueden hacer esto!
–¡No hice nada malo!– dijo Agatha
–Tendrás que ser llevada al lugar de ejecución, donde serás colgada por el cuello hasta que estés muerta– terminó el juez
–¡Basta!– gritó cuando parecía que unos rayos de color amarillo empezaron a salir de Agatha–. ¡Déjenme tranquila o se va a arrepentir! ¡Voy a hacer que se arrepientan!
De repente por los mismos rayos de color amarillo lograron llenar la habitación de un color blanco.
Desperté algo aturdido, vi que el libro estaba quemado y estaba en el ayuntamiento. Por lo visto el hoyo me había llevado nuevamente a mi universo.
Gateé para tomar el libro que ahora estaba quemado. ¿Ahora cómo voy a leer el libro?
Al ver hacia arriba jadeé al ver que el zombi que me había perseguido tanto en mi universo como en el de Cynthia nuevamente estaba en mi universo (quizás cayó en uno de esos hoyos en los cuales Coraline, el gato y yo caímos). Y al verlo bien era el mismo juez que ejecutó a la niña y los otros seis zombis eran los demás jueces.
