Solo deseo tus feromonas

Capítulo 39 - Te quiero a ti

Tong Che se congeló, un rubor subió hasta la punta de sus orejas, bajó por sus mejillas y se extendió hasta su cuello.

Levantó la cabeza bruscamente y miró directamente a Mu Hanfeng, sus labios se movían pero no salían palabras, sus oídos zumbaban.

Mu laoshi... ¿qué quería decir?

Antes de esto, Tong Che había escuchado a Mu Hanfeng burlarse mucho de él. Pero las palabras que acababa de decir eran claramente diferentes a todo lo que había oído antes.

Antes, sólo pensaba que Mu Hanfeng se burlaba de él por diversión, y no pensaba mucho en ello. Sin embargo, las palabras eran tan contundentes y directas que Tong Che no pudo evitar pensar en ellas.

Es más...

Los ojos de Tong Che bajaron y se posaron entre las piernas de Mu Hanfeng por un momento antes de alejarse apresuradamente de nuevo.

En ese momento, sintió que su cabeza no giraba.

¿Podría ser realmente tan atractivo para Mu laoshi? ¿O se trata de la atracción natural que siente un alfa por un omega con el que tiene una alta compatibilidad de feromonas?

Debe ser esto último. Tong Che apretó los labios, el calor se disipó y el momentáneo salto de alegría y felicidad se desvaneció.

Sí, debe ser esto último.

De lo contrario, ¿cómo podría atraer a Mu laoshi?

Después de que Mu Hanfeng dijera eso, sus ojos se posaron en el rostro de Tong Che, sin pestañear, sin perder una sola expresión de su cara.

De hecho, en el momento en que lo dijo, se arrepintió un poco.

Sabía muy bien que Tong Che tenía la piel fina y no soportaba que le tomaran el pelo, y mucho menos que le asustaran.

De acuerdo con su "plan de persecución de esposa", originalmente quería tomar las cosas lentamente y paso a paso.

Pero en ese momento, si no decía la verdad, Tong Che definitivamente se lo pensaría más y podría no cantarle más.

Sabía lo mucho que el pequeño omega valoraba este asunto y lo mucho que le importaba su estado de sueño.

Por eso no quería que lo malinterpretara.

Por lo tanto, tuvo que romper las reglas y tener un enfrentamiento.

Pero en el momento del enfrentamiento, tuvo que admitir que esperaba la reacción de Tong Che.

Era como una mesa de juego, en la que él había revelado sus cartas primero y aún no se sabía quién era el ganador o el perdedor.

Sin embargo, ahora, observando las múltiples expresiones de Tong Che antes de cambiar finalmente a una abatida, Mu Hanfeng era raramente incapaz de adivinar lo que el pequeño omega estaba pensando.

"Yo... entiendo", antes de que Mu Hanfeng pudiera procesar nada, Tong Che ya había abierto la boca. Habló muy rápido, y había dos puntos de queja ocultos en su tono, "Entonces... entonces me iré a dormir primero, Buenas noches, Mu laoshi".

Había pensado que Tong Che se sentiría tímido y avergonzado, e incluso había pensado que Tong Che se enfadaría con él por ser demasiado pícaro y echarlo de la cama, pero nunca había pensado que sería así.

Vagamente sintió que Tong Che había malinterpretado algo, pero ya había sido tan tajante con sus palabras hace un momento, ¿cómo podría malinterpretarlo si no?

Pero antes de que pudiera preguntarle de nuevo, el pequeño omega ya se había tumbado, se había enrollado fuertemente en una bola de masa con la manta, y se había dado la vuelta, con la espalda mirando a Mu Hanfeng.