Toxic- Vmin

Adicto a ti

Decir que después de mi secuestro todo se había arreglado es mentira, pues no contaba con la terrible toxicidad de Taehyung. Al terminar con Lee Minho y su hermano, las tierras nos fueron devuelta, mi madre estaba muy feliz e inmediatamente llamó a Roger el capataz de la hacienda cuando ellos administraban y este se sintió feliz al verlos nuevamente. Los demás vinieron uno a uno pues amaban esta hacienda como lo hacíamos nosotros. 

Mamá hizo un acuerdo con el señor Kim para el ganado que se había perdido, pues Minho lo había vendido en un precio absurdo, su interés era el petróleo y no lo que se producía en la hacienda, por suerte los caballos estaban intactos al igual que los cultivos de manzana y naranja. El maíz por suerte teníamos tiempo para sembrar y con un préstamo que conseguí logré hacerlo. Algo que me puso muy triste fue la pérdida de Hoseok, su bebé no merecía morir por ese maldito, pero lo hecho hecho está. Me reuní con él y lo vi apagado, tengo cinco meses de embarazo y al verme noté que lloraba. 

Yoongi está casi caminando por milagro, pues el embarazo aumentó su pereza y ahora duerme bastante. — Yoongi debes activarte...

— Primero no soy un consolador para ser activado, segundo mi suegro dice que puedo dormir lo que quiera... Min, mi reinado está iniciando soy la luz de Jungkook.

—  Mi padre es el mejor... Espero que todo salga bien con su boda.

—  Lo hará, su novio es afortunado.

— ¿Quién es afortunado? —  Dijo Jungkook entrando al café con unas compras. 

—  Tú, pues no hay ningún hombre que sea tan sensato y amable como tú. —  respondí, este se sentó a mi lado y vio a su hijo que por fin estaba saliendo de  su depresión. Jungkook es genial, su voz su porte y sobre todo la confianza que le da a su pareja, ese enano es suertudo. 

— Jimin te quería proponer algo... —  Escucho atento, Jungkook me prestó el dinero para sembrar el maíz y abonar los árboles de manzana y naranja. —  Me gustaría que te unieras a mi empresa de pasteles  y vino, hablé con los Kim del condado vecino y me ayudarán con la preparación del vino, pero necesito una buena producción para iniciar y los manzanos de la hacienda de mi yerno aún no producirán.

—  La cosecha de los míos será buena, creo que sería un gran negocio, pero yo aún...

—  Nop, ese préstamo lo pagarás en el plazo que acordamos, lo demás es negocio. ¿Te parece?

Me dio la mano y le sonrío, de pronto veo a Yoongi hacerme de señas me giro y lo veo, Taehyung viéndome con una cara que sé que significa problemas. Él no sabía quien me había prestado el dinero, siente unos celos enfermizos cuando estoy con Jung o cuando le hablo. No entiendo el porqué se niega a confiar en mi. No acepté su dinero por obvias razones, me ha insultado tantas veces que preferí hacerlo por mi propia cuenta y sin su ayuda, sé que está enojado porque me fui de su casa, pero mi casa es mi hacienda lo que heredaré, mis padres solo me tuvieron a mi.

—  ¿Podemos hablar?— Noto su descontento y su tono tan molesto, ni siquiera saludó a mis amigos.

—   Primero que nada, deberías saludar a mis amigos. — se gira hacia ellos y solo dice "Hola" y me ve a mi.

— Segundo, si es hablar sí, pero si vas a discutir no. 

—  Jimin, ve y habla con tu novio...

—  Jungkook, no es mi novio jamás me lo ha pedido, pero iré con él... Es un trato lo del negocio Jung. —  Él asiente y me retiro con Taehyung. 

Narradora

 Taehyung no podía evitarlo, odiaba a Jung Jungkook era todo lo que las adolescentes deseaban en un hombre, Jimin lo veía como colegiala enamorada y eso lo hacía sentir estúpido. Fueron hasta el parque central del pueblo y vio a Jimin con su vientre abultado, sintió una opresión en el pecho al hacerlo sentir mal. — ¿Por qué no me dijiste que él te prestó el dinero?