El principio del fin

Escape IV

Septiembre - Noviembre.

Septiembre Y ya tenía tres meses, sep. No trajo muchas novedades, ella por lo regular se encontro con una rutina bastante cómoda, al primera hora después del desayuno, ir a la biblioteca y estudiar los libros y los movimientos de barita, sin lanzar el hechizo, después de tres a cuatro horas demorando los libros, empezaba a ayudar a Kreacher con la limpieza de la casa.

De ahí a la comida y la cena, y más ayuda en la casa.

Noviembre, fue más de lo mismo solo con la diferencia que ella estaba un poco más gorda.

Y empezaron los vómitos, cambios de humor y sobre todo a comer más.

Con 4meses Harry estaba mas que lista para matar a cierto señor oscuro.

Pero Noviembre, también le hizo ver su realidad, por que Luna y Neville le abrieron los ojos, y más cuando casi se ahoga cuando en el periódico salio la noticia del Siglo.

Thoumas Salazar.

El sobrino de tu ya sabes quien, que estaba luchando abiertamente con las políticas de Tu ya sabes quien.

Y con esa bandera de alarma, Harry pidió ayuda para comportarse como 'Lady respetable' y dejo la limpieza a favor de aprender, leyes, y todo aquello que un heredero debería saber.

Harry estaba en su nueva casa con su dos bebes, Teddy ahora tenía un mes y Bell tenía ya 8 meses. 

Una noche...

Estaba en algún lugar... cálido. No, estaba caliente. Los pantalones cortos que usaba para acostarse estaban bajos mientras se retorcía, temblando cuando le acariciaban los muslos, una voz suave y relajante en su oído mientras otra mano descansaba sobre su estómago. Se sentía... demasiado cálido, podía escuchar la respiración en su oído mientras su corazón se aceleraba, su respiración se hacía más pesada mientras sus ojos se nublaban. Se sentía... bien. Más que bien, se sentía... acalorada, excitada. Los dedos se deslizaron suavemente por su estómago, haciéndole cosquillas leves pero excitándola mucho más. Quería sentir algo, su respiración se volvió más ruidosa, jadeando por aire mientras empujaba hacia arriba. Ni siquiera sabía lo que estaba haciendo, sus manos apretaban desesperadamente las sábanas de su cama mientras se deslizaba hacia arriba y hacia abajo. El calor viajó hasta su sona v y sus mejillas mientras trataba desesperadamente de averiguar qué estaba pasando.

Jadeó, disparando hacia arriba ante el sonido del llanto. Le tomó un segundo darse cuenta de que estaba sudando, su corazón latía aceleradamente mientras se levantaba rápidamente de la cama hacia Belladona y Teddy.

"Shushhh Bell, Teddy", todavía estaba sin aliento, pero eso no impidió que Harry hablara con sus hijos suavemente.

"¿Estan bien mis bebes?" Harry dijo, contento con el resoplido con el que el niño se dignó responderle, y la sonrisa algo descarada de la niña.

"Es esta casa, ¿no?... Me llevará un tiempo acostumbrarme...". Harry susurró sobre el sonido de más resoplidos. "No es propio de ninguno despertarte tan temprano". Al menos para Bell ya que Ella dormía cafa vez más pero Teddy ya comenzaba a tener una rutina.

Harry entrecerró los ojos con sospecha, "No tienes hambre, definitivamente no necesitas cambiarte..." susurro cuando miro a sus dos pequeños que estaban en una cuna compartida.