Parte 3.

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Mi cuerpo se tenso al sentir el ronroneo de la voz de Harry en mi oído, mi cuello comenzó a humedecer al sentir el rose de los labios de Harry contra mi cuello, pequeños mordiscos de sus labios me hacían tener escalofríos en mi. Deje salir un quejido de dolor al momento de que Harry me mordió con fuerza el cuello. Tome sus brazos, empujándolo lejos de mi.

- ¡¿Que te sucede?!.- Mi voz era agitada, sentía mi cuello arder de dolor, Harry solo mantenía una sonrisa sarcástica en su rostro.

- ¿Que me sucede? Tu eres lo que me sucede, Carter.- Sus manos volvieron a posicionarse en mis caderas, sentía sus labios muy cerca de mi.- ¿Que me hiciste? Te mire ayer y me volví loco, me sentía como un maldito adolescente avergonzado cuando comenzaste a hablarme de esa manera.- Susurraba cercas de mis labios, estaba tan cerca que no pude evitar soltar un suspiro entre sus labios.

- Eres el novio de mi madre... Esto no esta bien.- Mi voz era casi un susurro leve cerca de sus labios. Cuando menos lo espere sentí la presión de los labios de Harry con los míos, no podía creer lo que estaba haciendo, no quería recibir el beso y el se daba cuenta al sentir mis sacudidas para soltarme, sentí como abrió paso dentro de mis labios con su lengua, no resistí mas y deje que sucediera, sus labios eran muy suaves, y tenían un sabor exquisito a menta, este hombre me mataría y apenas lo conocía, no pude evitar abrir uno de mis ojos mirando la figura de mi madre que venia hacia nosotros distraída en su celular, tome a Harry de los hombros y lo aleje de mi antes de que llegara, pude observar su rostro de confusion al separarlo de mi.

- ¡Harry! ¿¿Mi amoor!?.- Su chillido de voz reventó mis tímpanos, Harry la tomo en sus brazos y la beso como si fuera su ultimo beso, ver eso para mi era repugnante, escuchaba sus respiraciones agitadas, se no dejaba de observar eso vomitare enfrente de ellos.

- ¿Nos mostraras la casa amor?.- Mostró un puchero mientras daba un pataleo contra el piso, mi madre tenia 34 años y se mira como una adolescente hormonal. Harry asintió sin decir palabra y me volteo a ver, soltó una ligera risa al mirar mi bolso lleno de agujeros. 

Comenzó a caminar a al frente de nosotros después de hacerle una señal al mayordomo para que metiera las maletas a la casa, Harry empezó a imitar la voz de un hombre muy elegante haciendo que riera, mi madre solo lo ignoraba, su casa era preciosa, la sala era adornada por una chimenea, demasiado elegante para ser casa de un chico como Harry, la cocina era gigante, había sarteneros que en mi vida había mirado, las paredes de los pasillos estaban adornados con fotografías familiares de los Styles, no le tome atención a las fotografías no era de mi incumbencia, cada cosa que observaba mi madre en la casa soltaba un chillido de su boca, la casa era asombrosa pero no era para tanto, sentí la mirada de Harry hacia a mi, voltee la mirada hacia el, estaba parado en una de las puertas observando, baje mi mirada y no pude evitar sonrojarme.

- Bien... Detrás de esta puerta esta tu habitación, Carter. La elegí perfectamente para ti.- Dicho esto abrió la puerta ante mis ojos, no podía creerlo era preciosa, las paredes estaban pintadas de un color blanco perla, una cama con caídas de seda desde su cabecera y demás, era hermosa, perfecta.- ¿Te ah gustado?.- Soltó una risa traviesa, asentí como tonta al observar la habitación.- Me alegro, estaré con tu madre, mientras te quedas en tu habitación o has lo que quieras.- Harry cerro la habitación de golpe en mi cara. Eso había sido muy grosero y maleducado de su parte.

Abrí el bolso y Caramelo salio corriendo de la bolsa para lanzarse hacia a mi, solo me carcajeaba al sentir las dulces lamidas de caramelo, ella comenzó a lloriquear, supongo que tenia hambre, tenia que ir a comprarle comida para que no muriera de hambre el pobre.


Estuve horas en mi preciosa cama acariciando a Caramelo, tenia sed así que deje a caramelo en la habitación y salí de mi habitación hacia la cocina para tomar un vaso de agua, la casa era hermosa, y la cocina mas, deje el vaso en el lavabo y me subí corriendo las escaleras, cuando comencé a oír jadeos gruesos desde el baño, me acerque a la habitación donde dormía Harry y mi madre, ella estaba dormida pero Harry no estaba en la habitación... fui ala dirección donde provenían los jadeos, abrí la puerta del baño y mire a Harry sentando en la tasa del baño... masturbándose.


- ¿Acaso tuviste un mal sexo, lindo?.- El me observo con vergüenza mientras lo miraba con picardea.

My Mom's New Boyfriend.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora