14

37 4 1
                                    

Izuku aún recuerda ese momento donde Katsuki se le declaró de forma seria.

- Oye, Deku.

- ¿Si?

- A las cinco en mi cuarto.

- ¿Uh, que cosa?

Narra Izuku.
Kacchan se marchó y solo me dijo que fuera a su cuarto a las cinco...¿Que querrá decirme? Que miedo estar con él a solas, Kacchan me gusta tanto pero se que no siente lo mismo por mi, si tan solo pudiera estar con el, siendo más que amigos.

Narra Katsuki.
Ese maldito, debe aceptar mi propuesta de forma seria, mi última declaración solo fue decirle que éramos novios y darle un beso, ya de eso no nos hemos besado ni nada, debo pedirle ser su novio.

Eran casi las cinco, Katsuki estaba nervioso, cosa rara de él, quería ser novio de Izuku, lo deseaba.

Izuku llegó un poco antes.

- Kacchan, hola.

- Maldito, llegaste antes.

- Perdón.

- Bueno, necesito que me escuches, y esto no es una broma.

- ¿O-ok?..

- De verdad, créeme.

- Lo haré, ¿q-que pasó?

- Deku, hemos sido enemigos por mucho tiempo, y te hice daño en el pasado, lo admito, pero estos años, con lo de los besos y nuestra relación de amistad, me di cuenta que te veo más que un amigo para mi, me gustas Midoriya.

Narra Izuku.
Quede congelado, ¿de verdad? ¿yo gustarle a Kacchan? No podía creerlo, se que él me dijo que no era broma, pero es difícil para mi creer que de verdad, mi mejor amigo con el cual vengo estando como loco enamorado tras el hace más de 7 años, le gusto también.

- Kacchan..

- Se que eres hetero, y que probablemente te guste Uraraka, pero necesitaba decírtelo.

- Kacchan, te dije hace mucho que me gustabas, ¿lo olvidaste? Aparte, te pedía besos, ¿como voy a ser hetero?

- ¿Cuando?

- Cuando me preguntaste que si yo gustaba de ti.

- No lo recuerdo, pero a lo que quiero llegar, ¿sientes lo mismo por mi?

- ¡Si!

- Bien, entonces, ¿Puedo ser tú novio?

- ¡Claro!

- Gracias Izuku, te quiero.

- A-ah Kacchan..¿desde cuando eres cariñoso?

- No se, es que tengo sueño, pero ya solo déjame besarte.

Se besaron por el largo tiempo hasta que la falta de aire los agarró a los dos; estaban más que felices.

- Yo también te quiero, Kacchan.

Kacchan sugoi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora