Afortunadamente, todo salió como debía de haber salido; Alexei fue en busca de Lank y de sus padres, pero al llegar al templo, sólo los padres estaban ahí.... Lank ya se había ido. Cuando regresaron a EAMI, fueron colocando a Douma en una cámara que permitía estudiarlo más a fondo y descubrir cuál fue su origen, ya no eran necesarias las lámparas UV ni las cadenas con esencia de glicina, él ya estaba muerto.
- Te has equivocado, Alexei, sobre Lank, ella nos salvó la vida.
- Sí, pero se ha transformado en un demonio, no podemos dejarla ir.
- ¡Pero ella venció a Douma! Él iba a causar caos en el mundo, y ella lo paró. ¿No te es suficiente prueba de que ella está de nuestro lado?
- Puede ser, pero el mal... Jamás descansa, y esa amenaza anda libre en el mundo.
- No te refieres a nuestra hijacomo a una amenaza, ¿verdad?
- No.... Me refiero, a una mucho mayor.
- ¿Entonces a quién?
- Muzan Kibutsuji...
-......
- El rey de los demonios, es quien transformó a Douma en un monstruo....
- Él podría estar en cualquier parte del mundo. Si no lo detenemos, podría ser el fin de la raza humana.
- Creemos que ella lo está buscando y tal vez.... Algo más que eso.
- ¿Qué podría ser?
- Tal vez, está en busca de una cura.
- ¿Podremos encontrarla?
- Si la hay, entonces, buscaremos, en cada rincón del mundo, debajo de una piedra, en las profundidades del mar... En donde quiera que se encuentre, ella ha de estar luchando contra el demonio que habita en ella...
- No dudes de ella, Alexei, tomó la medida que ella creía necesaria para acabar con esto, y lo hizo; se requiere de mucho valor para hacer algo así, conocemos bien a nuestra hija, es una mujer fuerte, jamás se irá por el camino del mal.
- Puede que ustedes tengan razón.... Hay veces que se necesita de un monstruo para combatir a otro monstruo.
Pov* Lank
Ser un demonio, no es nada fácil, al menos no para mí; sí, tal vez tenga poderes sobrehumanos, pero dejé atrás a quienes más amaba, a mis padres, temo que nunca los vuelva a ver, al menos están vivos y a salvo; con mis nuevos poderes, podía haber revivido a mi amigo Bill, pero en mi interior, él me dijo que NO. Él quería ser parte de mí, vivir en mi interior, como si fuera mi consciencia, de esta forma podría ser más ayuda, que estando "vivo", y creo que tiene razón, es mejor que nuestros seres queridos que ya no están con nosotros, estén vivos en nuestros corazones.
Pero no descansaré, si existe otro ser mucho más fuerte que cualquier demonio, tengo que deshacerme de él a cualquier costo.
Y estando en el otro lado del mundo, jamás imaginaría, que estaría justo detrás de él.
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- *lo toco la espalda* Hola Kibutsuji...
- ¿Q-quién eres tú?
- Soy tu perdición.
- ¡........!
- Prepárate.... Para morir. - Le encajo una jeringa con una dosis bastante letal de glicina.
Pronto me alejé de él, mientras oía que se quejaba del dolor, nadie podía hacer nada por él, y justo después... Amaneció.
