UN MES DESPUES
Ya era de mañana y en las instalaciones donde se quedaban los seleccionados Peruanos era tranquilo pero no por mucho tiempo.
-Voy a desayunar ¿vienes?- le dice Flores a Cueva.
-Anda tu, yo bajo dentro de un rato- responde Cueva poniéndose un polo, Flores solo alza los hombros y se retira.
Cuando Cueva notó que estaba solo en la habitación se sienta en la cama a pensar, no era una persona que sobrepensara las cosas pero el se sentía raro y no sabía porque o quisas si lo sabia y no lo quería aceptar.
Después de un rato sale y se dirije a la cafetería del hotel, pero antes de llegar al doblar el pasillo se encuentra con el italiano.
-Hola cholito- dice el italiano viendo al trujillano.
-Hola banbino, ¿qué tal la noche?- dice acercándose al italiano.
-Moto bene/muy bien- responde el italiano.
-Me alegra, oye ya estas preparado para el entrenamiento banbino- dice Cueva mirándolo.
-Claro estoy muy entusiasmado- responde el italiano con una sonrisa.
-Esa es la actitud- dice el Trujillano.
Siguieron caminando hasta llegar a la cafetería cuando se sientan en las bancas saludan a sus compañeros y empiezan a fastidiar a Cueva, el no se queda atrás así que les responde de la misma manera, así fue el desayuno de la selección peruana, después del desayuno se dirigieron al bus que los llevaría al estadio para entrenar .
En el bus el italiano se encontraba hablando con el Trujillano llamando la atención de dos de sus compañeros.
-No crees que esos dos andan muy risueños- le dice Renato a Carrilo que estaba a su costado.
-Oe si verdad?- le responde Carrillo
-Crees que sea una nueva parejita- Renato le pregunta a Carrillo alsando una ceja.
-Puede ser que si- dice Carrilo con cara cómplice, estos dos ya tenían a su mente trabajando en un plan para ver como lo averiguan.
Llegando ya al estadio todos bajan y saludan al profesor Gareca.
-Hagan parejas de dos para hacer pases- habla el profesor viendo a los chicos.
-Si profesor- responden todos.
Cueva hiba a hacer equipo con Renato pero Cerrillo tenía otros planes.
-Cholo yo haré equipo con Renato tu anda con el banbino- dice agarrando la pelota.
Cueva solo se encoje de hombros y va donde el italiano mientras que Carrillo y Renato tenían sonrisas cómplices.
-Banbino yo seré tu pareja- le dice Cueva dándole la pelota.
-¿Mi pareja?- pregunta el italiano poniéndose un poco rojo.
-Si, pareja para hacer los pases- le responde Cueva nervioso por la confusión de su compañero.
-A para los pases- dice el italiano sonriendo y empezando a entrenar.
El entrenamiento duro unas horas, los jugadores ya se encontraban en los vestidores alistandome para regresar al hotel.
-Apura mierda estas casi una hora ai- dice Cristián tocando la puerta de la ducha.
-Hay más duchas no fastidies- le responde Renato que se encontraba adentro de la ducha.
-Si pero también están ocupadas cabeza hueca- le responde Cueva.
-Ya espera cholo, ya salgo, no te
molestes- le dice Renato haciendo enfasis al final.