Despedida

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Una semana después.

El equipo peruano se encontraba en el hotel , algunos alistándose para ir a sus clubes y otros para tener vacaciones, El Perú ya había jugado varios partidos en algunos ganaban y en otros perdían pero las esperanzas estaban tan latentes como en el primer partido.

En uno de los cuartos del hotel se encontraba un jugador cambiándose y otro afuera ansioso apresurándolo.

- Te apuras cholo- dice el orejas esperando afuera del baño.

-Ya salgo, además si sigues tan impaciente no leeré esa carta- responde Cueva.

-Ya ya está bien mejor guardo silencio- dice por último el orejas.

Hace una semana Cueva había recibido una carta que se le olvidó leer hasta ahora, ya que su compañero la encontró y le dijo que la leyera.

Después de un rato Cueva sale del baño y ve al orejas sentado en la cama, Cueva solo mueve su cabeza en resignación y se sienta a su costado agarrando la carta.

-Hábrela ya- dice su compañero, Cueva habre la carta y empiesa a leer su contenido en voz alta para que su compañero escuche.

Cada frase que leía de la carta lo asombraba más que la anterior, como alguien podía escribir algo tan lindo y ala ves tan raro.

Acabando de leer la carta se quedó un rato en silencio procesando lo que la carta decía, hasta que su compañero rompió el silencio.

-La persona que escribió esa carta debe ser muy romántico- dice el orejas agarrando la carta.

-Quisas se equivocaron de persona, no creo que sea para mi- dice Cueva recostándose en la cama sin creer que una carta con palabras tan bonitas podría ser para el.

-Como puedes creer eso, además acá clarito dice, CRISTIAN CUEVA, no creo que alguien más tenga ese feo nombre- dice el orejas para fastidiar a su compañero riendo.

-Trae acá mierda, como si tu nombre fuera muy bonito- dice arrebatándole la carta de la mano.

-Ademas por si estás ciego no dice de quien es la carta, talvez sea una broma- habla guardando la carta.

- No creo que sea una broma, quien se tomaría el tiempo de escribir una carta echa a mano con bonitas palabras y buena ortografía, si fuera una broma estaría echa a computadora, pensa pe chato- responde el orejas.

-Entonces, ¿De quién crees que sea la carta?- pregunta Cueva volviéndose a sentar y mirando a su compañero.

-No se talves de un hombre que acaba de llegar al Perú, que le gusta tocar el piano, nació en Italia, que habla italiano y que le llamas banbino- dice el orejas caminando por el cuarto y fingiendo duda.

-Mejor cállate mierda ya se a quien estás refiriéndote y para bajarte de tu nube, no puede ser el ya que la misma noche que llego la carta yo y el salimos- dice Cueva seguro para después taparse la boca ya que se dio cuenta que soltó la lengua.

El orejas se volteó para darle una sonrisa victoriosa acercándose a él.

-¿Como que saliste con el italiano y no me contaste?- dice el orejas ofendido.

- Escuchaste mal- dice Cueva pasando saliva y negando con la cabeza, su compañero solo lo mira y se suelta a reír para dejar el tema, no precionaria a su amigo .

-Ok ok escuche mal, pero, ¿qué le résponderas?- pregunta el orejas alsando una ceja.

-¿Porqué tendría que responderle?- dice sentandose en la cama.

-Como ¿que porqué?, después de que se tomara el tiempo de escribirte esa carta no crees que se merece una respuesta al menos- dice obio.

-Esta bien, le responderé, pero no esperes que ponga algo lindo- digo agarrando mi mochila para sacar un lapicero y una hoja.

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⏰ Última actualización: Jul 07, 2022 ⏰

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