Capítulo 11: Lionel, el mejor psicólogo

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Narra "el doctor Smith":

Al parecer, Lionel John era un chico de unos 25 años que quería hacer que las personas con enfermedades mentales pudieran vivir en tranquilidad junto a toda la sociedad. Patético, de seguro no lo habían atacado muchas veces. Tenía experiencia en un hospital que se prendió fuego a la primera semana en la que estuvo, quizás era un sádico detrás de esa cara de inocencia. Él era un hombre albino de, quizás, dos metros de altura. Medía diez centímetros más que yo, o eso creía. Su cabello era demasiado largo, blanco como la nieve y liso. Sus ojos eran rojizos por la falta de melatonina en ellos.

-Entonces, crees que podrás encargarte de cada uno de los pacientes sin ser atacado-

-Exacto, no pierdo nada en intentarlo, y si fracaso moriré sin más- su sonrisa me daba escalofríos.

-No me engañas, eres un sádico y posiblemente un psicópata, tu cara de amabilidad me pone los pelos de punta-

-¿Crees que soy un sádico solo porque te pone nervioso mi presencia? ¿No crees que solo soy intimidante? ¿O es que estás ocultando algo que no quieres que sepa?- me helo la piel cuando me dijo eso último.

-Bueno, ya sé que puedo contestarte a todo- moví mis papeles con enfado -Puedes marcharte- borré esa sonrisa de su cara.

Él se levantó y fue lentamente hacia la puerta. Era valiente, formidable, y parecía que sabía aceptar la derrota. Me gustó eso, no me quedaba de otra.

-Debes descansar para mañana- él me miró sorprendido -Comienzas a las 9, ¿vives muy lejos de aquí?-

-¿Por qué pregunta?-

-Tu respondé y lo sabrás-

-Vivo a tres horas de aquí-

-Bueno, si te parece bien te asignaremos una habitación aquí. Como psicólogo te pasarás casi el día completo aquí y es muy peligroso dejarte ir por esta carretera en plena noche-

Su cara se llenó de felicidad, se fue tranquilamente. Aún que ahora tendría dos pruebas que pasar: Erika y conducir por la noche.
Eran las 11 de la noche, lo más seguro es que Erika hubiera aprovechado la hora de la cena para matar. Por lo cuál quizás se topé al doctor Lionel y trate de matarlo. Si él logra defenderse tendrá que conducir en la carretera. Mañana ya sabré si sobrevive o no, dónde también veré que será mejor tenerlo como aliado o no.

Narra Erika:

Estuve corriendo por los pasillos en búsqueda de Elisa. Hasta que la encontré vagando por los pasillos. Me acerqué corriendo a ella, pero sin darme cuenta tropecé y caí al suelo. O quizás no había tropezado, ya que mi pierna comenzó a sangrar.

-Sabía que ibas a intentarlo- se estaba riendo de mí, ella tenía una pistola en la mano. Posiblemente fue con la que me había disparado.

-Te odio, maldita zorra- me arrastré tratando de levantarme mientras ella solo se reía.

-¡Eres muy tonta! Ibas a matarme y al final seré yo quien te maté- me apunto con su pistola a la cabeza -No te daré derecho siquiera a tener tus últimas palabras-

No me dió tiempo a que pasará toda mi vida por mis ojos. Tan solo pude ver a Elisa desplomándose en el suelo. Cuando cayó, pude observar que salía sangre de su cabeza. Me sorprendió bastante.
Al escuchar unos pasos acercarse tan solo temí; en ese momento estaba indefensa, confusa, no sabía si solo la mató a ella o si pronto también sería mi fin. Tenía miedo, por primera vez, a la muerte.

-Y pensar que esa enfermera era la sádica- llegaba aquel hombre de cabello blanco y ojos rojos con la pistola en alto.

Seguía con miedo, hasta que se agachó frente a mí.

Lo que siento en verdad (Jason the toymaker x tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora