𝗠𝗘𝗟𝗜𝗙𝗟𝗨𝗢: un sonido excesivamente dulce, suave o delicado.
En un mundo en donde existen alfas, betas y omegas, las personas también tienen características animales de sus antepasados pudiendo convertirse en estos.
Los hermanos Haitani dos a...
Llegó el día del festival, el pequeño se levantó demasiado temprano despertando también a su hermano quién le riñó y lo atrapó entre sus brazos metiéndolo en la cama haciéndolo dormir un rato más.
En la tarde-noche partieron hacia donde estaba en festival, iban junto a Kakucho quien fue arrastrado por el niño cuando fue a informar sobre unas cosas a Izana.
Las calles estaban muy iluminadas con luces de colores haciendo a todos disfrutar de aquella bonita vista.
Era un día demasiado frío así que Izana se encargó de abrigar al pequeño aunque no quisiera pero por su baja temperatura tenía que estar bien abrigado o podría correr el riesgo de sufrir hipotermia.
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Pov Ryu.
Me siento en un banco apartado de la multitud y me dedico a ver como las personas pasan.
Eran extraños, algunos tenían orejas, otros cuernos, alas... ¡Yo también quería unas alas para volar! ¡Sería demasiado guay y así sería un dragón volador!
Salí de mis pensamientos al ver como una onee-san con largas orejas de conejo me hablaba.
- Hey pequeño ¿Dónde están tus papás? - me preguntó dulce.
Me quedó mirándola y paso mí vista a otra onee-san con unas redonditas orejas de ratón.
- Yo no tengo papás - le digo a la onee-san con largas orejas mirándola.
- Oh...yo...- miró a su amiga pidiendo ayuda.
- Hana...- le susurró la de adorables orejas y luego se agachó a mí altura - ¿Y con quién has venido? - me pregunta con una sonrisa.
- Con mi nii y su novio - le contesto rápido.
- ¿Y donde están? - me pregunta la onee-san de largas orejas mirando alrededor.
- Nii se a perdido - hago un mohín - siempre se pierde...
- Se a perdido...- dicen las dos para luego mirarse entre ellas.
- Hey nenas ¿Qué hacéis llevamos un rato esperándolas...? - rápidamente busco aquella voz que hizo que me sintiera extraño pudiendo ver a un onii-san demasiado alto con el pelo suelto pintado negro y amarillo, a su lado había otro onii-san muy parecido pero con gafas.
Pov Ran.
Cansados de esperar a las omegas con las que teníamos hoy una cita fuimos a buscarlas pero cuando las encontramos...estaban junto a un pequeño niño peliblanco y con la piel demasiada pálida, resaltaba entre aquella multitud pareciendo como si no fuera de este mundo.
Un ángel.
- Ran...- me llamó mí hermano con un tono grueso.
- Chicos - se levantó la cita de Rindou quien estaba agachada delante del pequeño - él...se a perdido...- puso una mano en su cabeza lo que hizo a mí alfa reaccionar y que gruñera.
