kars en kimetsu no yaiba

Capitulo 4: La luna superior 5

El demonio que salió de la vasija, hablo con un todo amenazante.

Oh, gusto en conocerlos, mi nombre es Gyokko, ¿me das un minuto antes de asesinarte? -Gyokko.

Kaigaku estaba alarmado, porque era una luna superior.

Kars, será mejor que tengas cuidado de el -Kaigaku.

¿Luna superior? -Kars.

Son los demonios más poderosos, su número dice el rango dentro de las lunas -Kaigaku.

El demonio voltearía a ver a Kaigaku y se fijaría en su espada nichirin.

Por tu espada veo que eres un cazador de demonios, ¿por qué no tienes tu uniforme? -Gyokko.

Eso no es asunto tuyo -Kaigaku.

Bueno, en lo que nos concierne, ¿les gustaría formar parte de mi arte? -Gyokko.

Kars curioso preguntaría:

¿Qué tipo de arte haces? -Kars.

Una vasija comenzaría a moverse saliendo de ella una masa de carne, al ver bien eran barios aldeanos.

No les parece hermoso, la llamo... L agonie de alderon -Gyokko.

La masa de carne estaba conformada de los aldeanos, brazos, piernas y sus rostros tenían la mirada perdida.

No me sorprende -Kars.

Claro, esto era una prueba, solo quería ponerte a prueba. Parece que tienes buena vista -Gyokko.

Gyokko invocaría una vasija, del saldría otra masa de carne, pero era diferente esta estaba conformada de Cazadores De Demonios y tenía sus espadas nichirin clavadas en su cuerpo.

Aun no le pongo nombre, ando indeciso de que ponerle, pero si mueves las la espadas puedes escuchar un hermoso timbre -Gyokko.

Al mover las espadas se comenzaría a retorcer de dolor.

¡¡gyaaaa!! -Cazadores De Demonios

¿Y? ¿Qué piensan? -Gyokko.

Gyokko voltearía a ver a Kaigaku.

Te podría convertir en una pieza principal de mi arte -Gyokko.

Y después voltearía a ver a kars.

Tu tienes una belleza compara con una escultura griega -Gyokko.

No me interesa tu oferta -Kars.

Él se pondría enfrente de mi con tono amenazante.

No es una oferte que puedas rechazar... -Gyokko.

Kars en un rápido movimiento al sentir la agresividad de él, le lanzaría un golpe con Hamon, pero el desaparecería, se avía trasladado a otra vasija.

Oye, ni siquiera me dejaste terminar es muy descortés de tu parte -Gyokko.

No huyas, solo necesito tocarte tan solo un poco -Kars.

Para hacer que se saliera de la vasija esta vez me lanzaría rompiéndolas.

Gyokko se volvería a trasladar a otra vasija.

¡¿Qué crees que hace? Esas vasijas son el trabajo de mi vida, ¡solo eres un cerdo! -Gyokko.

Parece que es rápido, si quiero terminar esto rápido tengo que hacer que salga de esas vasijas y venga a atacarme.

Al ver que se enojaba al romper sus vasijas, se me ocurriría romper todas las vasijas hasta que decida salir y poder matarlo. Se comenzaría a formar una sonrisa en mi cara.

Si no sales a pelear tendré romper tu arte -Kars.

Gyokko al escuchar eso se enojaría.

¡Tu solo eres un cerdo que tiene músculos en vez de cerebro! -Gyokko.

Cuanto estaba rompiendo las vasijas veía como Gyokko me miraba con cara de odio. Estaba realmente enojado al ver como era destruida su arte.

Gyokko comenzaría a sacar peces de sus vasijas.

Peces asesinos centenar de agujas -Gyokko.

Los peces comenzarían a lanzar agujas. Sacaría las cuchillas de mis brazos desviando algunas, pero eran demasiadas, no podía con todas ellas, algunas me lograrían perforar la carne.

¡¡hyo hyo hyo!!! Te vez chistoso con esas agujas. Pronto caerás rendido por el veneno -Gyokko.

Mi cuerpo rápidamente comenzaría a crear anticuerpos inmunes al veneno, pero esto es raro mi cuerpo le cuesta adaptarse. ¿Qué es esta sensación?

Comenzaría a quitarme las agujas de encima.

Sabes tus vasijas no son la gran cosa, asta un ciego tiene mejor gusto que tu -Kars.

Al escuchar eso se enojaría conmigo.

¡Esos es porque tienes gusanos en los ojos pendejo! mis vasijas son lo más hermoso que veras jamás -Gyokko.

De las vasijas esta vez invocaría mas peces que se abalanzarían ente mí.

Técnica de sangre ¡diez mil peces voladores de arcilla! -Gyokko.

Rápidamente comenzaría a cortar los peces, pero los peces cada vez que los cortaba comenzaban a soltar un veneno, era veneno percuteaneo. Unos peces gracias al contacto me estarían envenenando, no podía con tantos y era inevitable el contacto.

Formare con tu esqueleto una hermosa escultura, los que pasen lo gozaran -Gyokko.

Me comenzaría a abrir paso entre los pescados, pero cada vez me sentía mas débil, mi cuerpo está sucumbiendo ante el veneno. ¿Por qué está pasando esto ahora?

Antes de poderme acercar caería en el piso.

Parece que resistes bien el veneno, un humano normal ya habría muerto hasta un pilar ya le costaría respirar por tales cantidades de veneno en su cuerpo, pero tu aun respiras. Solo es cuestión de tiempo para se sucumbas y mueras, es una manera elegante de morir, viendo retorcerte de dolor -Gyokko.

No podía mover mi cuerpo, no respondía. No puedo morir de una forma tan patética como esta.

¡Levántate cuerpo inútil! ¡Mierda! -Kars.