Black Widow → M.C

0.1

—Salga de mi clase señorita Williams.

—¿Qué? ¡Pero él comenzó! ¿Por qué tengo que salir yo? Eso es injus... —fui interrumpida—.

—Salga. Es una orden.

Tomé mis cosas, me levanté de la silla, miré mal a mi compañero y al señor Freeman —mi profesor de historia— y salí del aula.

Maldito seas Joshua Peterson. Ojalá compres un paquete de oreos y te salga una sin cremita.

Caminé hasta llegar al gimnasio y me senté en una de las graderías. Sería un largo tiempo el que tendría que esperar hasta que tuviéramos receso.

Tomé una liga y me amarré el cabello.

Miré hacia todos lados verificando que nadie más estuviese ahí, y cuando ya estaba segura saqué de mi bolsillo el teléfono de Michael. Si, de Michael Clifford.

Ayer en la noche lo dejé cargando con el cargador de Stella —obviamente— ya que ambos son iPhones, mi cargador no funciona con sus teléfonos porque lo que yo tengo no es digno de llamarse teléfono, es más un ladrillo con teclas.

En la mañana cuando ya estaba cargado lo prendí, pero resulta que el muy inservible tenía contraseña. Desde entonces he estado pensando cual podría ser, pero aún no se me ocurre nada.

"Michael1234" "Incorrecto"

"2011" "Incorrecto"

Suspiré. ¿Por qué demonios tienen que ponerle códigos a sus teléfonos? No hay nada más molesto que robar temporalmente un celular y que el muy maldito este bloqueado.

Aún tenía dos intentos para adivinar su código, pero si los fallaba lo podría bloquear permanentemente y tampoco quería eso, porque bueno, obviamente pensaba devolverlo.

Miré la hora y eran las nueve con veintiocho minutos, lo que significaba que en dos minutos tocarían la campana indicando el primer receso.

Levanté mi culo de la banca de la gradería empecé a caminar hacia el aula de Biología, donde se encontraba Stell. 

Apenas llegué cuando sonó el timbre. Stella salió de la clase y me miró sorprendida, ya que normalmente ella me va a buscar a la clase a mi y no yo a ella.

—¿Qué se supone que pasó? —me miro—. Tú nunca me vienes a buscar a menos de que algo pase Alice...

—El estúpido de Josh hizo que Freeman me sacara de su clase —la miré—. Empezó a hablar sobre la blusa de Arctic Monkeys que llevo y lo insulté, entonces Freeman me sacó de su clase... Pero es injusto porque él empezó y bueno...aquí me tienes.

—Iba a decirte que era interesante pero en realidad no lo es, así que andando.

Caminamos hasta llegar a una de las mesas que se encontraban afuera y nos sentamos. Normalmente somos Calum, Stella, Ryan, Kylie y yo, pero por alguna extraña razón ninguno de los tres vino hoy así que solo seremos Stell y yo. 

—Ire por unos chicles, ¿quieres algo? —pregunté—.

—Traeme unos a mi también.

—De acuerdo.

Me dirigía hacia la maquinita en donde estaban los chicles, es de esas en donde pones un dolar o un centavo y escoges lo que quieres, y de pronto choqué con alguien. Y me caí.

—Lo siento, lo siento, lo siento, en serio no te vi —dijo mientras me tendía una mano para ayudarme a levantarme —. ¿Estas bien?

—Si, yo estoy... —levanté la mirada. Maldita sea. Era Ashton. Ashton Irwin amigo de Michael. Ashton papacito Irwin amigo de Michael—. Bien. Lo siento, fue mi culpa, soy demasiado torpe. —me terminé de levantar del suelo—.

—Para nada, disculpa preciosa. —dió media vuelta y se fue. Fue lindo mientras duró—.

Yo solo venía por unos putos chicles. Unos putos chicles nada más. Ahora estoy temblando y puedo asegurar que mínimo me oriné.

Fui por los chicles rápidamente y me devolví a la mesa donde estábamos Stell y yo.

—Choqué con Ashton Irwin.

—¿Qué tu que? —abrió los ojos exargeradamente—. Maldita zorra, ¿y huele bien? ¿sentiste sus cuadritos? ¿y que tal sus brazos? ¿te trató bien? —preguntó con cara de estúpida. Sí, Stella está perdidamente enamorada de Ashton pero... Eso no quita que yo sepa que él es perfecto también, a excepción de que a mi no me gusta —.

—Sí, no, son excelentes, casi los chupo y sí.

—Maldita suertuda.

—Si claro, yo estoy bien gracias por preguntar —la miré y fingí una sonrisa. Ella me miró y rodo los ojos—.

—Hablando de otros temas, ya te conseguí el número de Luke —me dijo. Solté un grito de la emoción —.
—¡Gracias, gracias, gracias! ¡Te amo! Ahoratendré como amenazar a Michael. Gracias. —Le di un abrazo. Me miró—.

—No recuerdo porque eramos amigas —dijo—.

—Ni yo.

—Alice, ¿estás segura de lo que quieres hacer con él?

—Más que segura Stell. Él va a pagar por todo lo que me hizo. Por todo.

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N/A

¡Hola! Lo siento por haber tardado tanto en actualizar, pero últimamente he tenido muchos problemas y no he tenido inspiración. Espero que les guste, trataré de actualizar más seguido y les prometo que los próximos capítulos serán más interesantes. Si no entienden algo y queieren preguntar pueden hacerlo... Y también pueden votar y comentar (porfis :D). Big love ❤ xx
PD: En multimedia les dejo a Mikey ❤.
—Pau.