Se estiro sobre la banca mirando fijamente el cielo que estaba por sobre su cabeza haciendo una mueca leve por las nubes grises que estaban allí, claramente llovería dentro de poco.
Suspiro levantándose de donde se encontraba para caminar por entre las calles de New York.Se había mudado allí un año antes de la boda de Shoto e Izuku, aquel par había decidido casarse en el extranjero por obvias razones y regresaron a vivir a Tokio después de su luna de miel, pero el no, el se quedo alli.
Le gustaba la ciudad, llamaba todas las semanas a sus padres para contarles de sus días allí. Vivía bien, tenia su propio departamento, su mptocicleta, un ingreso monetario constante. Ademas de trabajar en sus propios cómics/mangas tambien dibujaba para algunas empresas que buscaban algo nuevo para publicidad, ganaba realmente bien con ello.
Miro a los lados para cruzar la calle cuándo sus ojos visualizaron un llamativo cabello pelirrojo, rapidamente lo reconoció y por pura inercia se acerco.
—¿Kirishima?—
—¿mmh?— el pelirrojo giro su cabeza y sonrió ampliamente al reconocer al rubio —¡Katsuki! Ya te dije que me llames por mi nombre—
—Como sea, ¿que haces aquí?— le miro de reojo y luego analizo el lugar, era un local de Café y Postres.
—Es mi tienda, trabajo aquí como chef principal— infló el pecho con orgullo, el pelirrojo se había mudado de Tokio a New York para abrir aquel modesto sitio en busca de llevar la cultura de cocina Japonesa a otros sitios.
—No sabia que fueras cocinero...— y como si nada el rubio se adentro al lugar mirando hacia todos lados con aquella mirada rubi.
—¡ven prueba uno de nuestros postres mas nuevos!— sin pensarlo el pelirrojo jalo de la mano al contrario hasta la cocina donde rebuscó por todos lados hasta sacar un bonito postre de tonos amarillos y decorado con flores.
Bakugo dudo pero finalmente tomo el cubierto para cortar un trozo y llevarlo a su boca, el sabor era excelente, era dulce, demasiado para su gusto pero no estaba mal.
Hasta que...
Comenzó a toser, su rostro se coloreo de rojo y sentía el aire faltarle
—Ugh...¿q...que mierda tenia el postre Eijiro?— se quejo mientras el contrario buscaba agua para darle mientras iba nombrando todos los ingredientes.
—...y piña—
—Puta madre...soy alérgico a la piña...—
Ambos ojicarmin se miraron a los ojos antes de que el de cabellos del mismo tono entrara en pánico, y que el rubio se desmayara.
Definitivamente desde ese dia Eijiro evitaría cocinar postres con piña para Katsuki.
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Romantic Red
Fanfiction¿el amor puede surgir una vez mas? Después de su primer intenso amor Bakugo no sabe si enamorarse de nuevo sea un buen camino para el. Pero Kirishima no es alguien que se rinde fácilmente ante lo que quiere, esta decidido totalmente a hacerle entend...