Violeta

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Después de fin de semana, mi rutina diaria cambio por completo, girando alrededor de un sol conocido como Taehyun. Me levantaba y le escribía, comía y le escribía, estudiaba y por desgracia apagaba el móvil para no distraerme, pues tenía que sacar el primer año de universidad si o si, que para algo me la estaban pagando mis padres. También iba a verle todos los días posibles, cada vez que tenía suficiente tiempo y el coche de mi madre libre, pues era una hora en auto y casi tres si cogía el transporte público, pero realmente merecía la pena todo el interminable trayecto con solo verle.



Yo ya había terminado mis últimos exámenes del curso, y en cierto modo, aunque aún no hubiera recibido los resultados, me sentía libre. Nada me obstaculizaba hablar con Taehyun por horas y horas.



-¿Y tú qué piensas hacer? -pregunté recostándome en mi cama, con una mano sosteniendo el móvil junto a mi oreja y la otra jugueteando con los pliegues de la sábana. Llevaba las últimas dos horas al teléfono con Taehyun, y aún así se sentían pocas.



-Ahora voy a bajar a ver a Bruno. -ese era el nombre de una de las ovejas de su granja. Si, Bruno, un nombre masculino a pesar de que el animal era claramente hembra, porque según Taehyun, veía en su mirada que se sentía hombre y no mujer. -Últimamente se comporta raro conmigo, casi no hablamos.



-Me refiero a tus planes de estudio, de futuro, idiota. -respondí entre risas.



-Oh, eso no lo he pensado.



-¿No tienes nada en mente? ¿Algo que quieras estudiar?



-Mmm...-se hizo silencio, únicamente escuchándose el rebote de la pelota contra la pared, esa con la que Taehyun llevaba jugando desde que me había llamado. -Me gustaría estudiar arte.



-¡Aquí en Seúl hay muchas universidades!



-Ya lo sé, pero no quiero dejar a mi abuela sola...



-...



-Y la granja también me gusta, así que quizás me quede aquí...



-Oh, entiendo...-intenté disimular el desánimo de mi voz, en como se me habían roto en pedacitos las ilusiones que tenía de que Taehyun se viniera a vivir aquí, conmigo. Ahora que yo tenía un piso propio podríamos compartirlo, a pesar de no ser muy grande. -Supongo que lo que decidas estará bien.



-¡Gyunnie!



-¿Qué? ¿Qué pasa? -pregunté alarmado por el cambio de tono, sorprendiéndome al escucharle y pegando un pequeño salto en el colchón.



-¡Acaba de salir un anuncio en la tele y uno de los osos era idéntico a ti!



-...



-Voy a hacerle una foto, espera.



-...



-Creo que me he enamorado de un oso.



-...



-¿Sigues ahí? Era broma lo de enamorarme de un oso, estoy casi cien por ciento seguro de que me gustan los humanos.



-Taehyun...



-¿Si?



Suspiré derrotado, incapaz de molestarme con él, incapaz de odiar sus tonterías y comentarios extraños, sencillamente porque había terminado por amarlos con el paso del tiempo.



-Que me voy a dormir.



-¿TAAAAAAAN PRONTO? A penas llevamos tres horas hablando.

COLORS - BEOMHYUN (ADAP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora