𝐋𝐚 𝐒𝐞𝐝𝐮𝐜𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞 𝐒𝐧𝐚𝐩𝐞 (𝐒𝐞𝐯𝐦𝐢𝐨𝐧𝐞)

Capítulo 7◉

Todavía sonrojada, Hermione entró en la biblioteca. Cogiendo los mandos a distancia, puso un DVD en el reproductor y encendió la televisión. Se acurrucó en el sofá, con la cabeza usando el reposabrazos como almohada. Apenas se movió cuando él entró en la habitación. Esperando que se sentara en su silla habitual, se sorprendió cuando se acomodó en el sofá junto a ella. Si enderezara las piernas, sus pies tocarían el muslo de él.

"¿Qué estamos haciendo?", preguntó él.

"Estoy viendo una película". Dijo ella con frialdad. "¿usted? Me está molestando".

Él resopló con fuerza.

Hermione era muy consciente de la cercanía de él. No podía creer que estuviera en un sofá, viendo una película con el profesor Snape.

"¿Y qué es lo que estamos viendo?", preguntó.

"El diario de Bridget Jones", respondió ella. "Ahora shhh".

Después de unos minutos más, él suspiró: "¿Es una de esas películas que los americanos llaman "Cliché"?"

"Sí", contestó ella, dándole una ligera patada en el muslo con el pie. "Ahora deje de hablar".

Vieron la película en silencio durante unos 20 minutos, antes de que él no pudiera aguantar más. "¿Qué tiene de malo su acento?", preguntó él. "Suena ridículo".

Hermione suspiró profundamente. "No es británica, es americana fingiendo tener acento británico. Ahora 20 puntos menos para Slytherin por hablar durante la película". Le dio un par de patadas más para enfatizar.

"¿20 puntos?", cuestionó. "Pero esta película es una tontería".

Hermione puntuó cada palabra con una patada en su muslo. "Por favor. Deje. Hablar".

Ella jadeó cuando él atrapó su pie en la mano. Sujetándolo con firmeza, gruñó. "20 puntos menos para Gryffindor por patear al profesor de Pociones".

Hermione trató de sacar el pie de su agarre, pero él lo sostuvo con firmeza. Suspirando, dejó de intentarlo y volvió a ver la película, dejando que él le sujetara el pie. Snape estaba más que sorprendido por su fácil rendición.

Todo se detuvo para Snape mientras sostenía su delicado pie en la mano. Esperaba que ella no notara el cambio en su respiración, o la erección que ahora se abría en su pantalón. Sujetando el pie con suavidad, empezó a acariciar el empeine con el pulgar.

Hermione se esforzó por mantener su respiración estable. La película estaba casi olvidada. Con la mirada fija en el frente, trató de no gemir por lo bien que se sentía. Su pulgar calloso acariciando su pie era excitante y reconfortante al mismo tiempo. El calor y la humedad se acumulaban entre sus piernas.

Snape se las arregló para permanecer callado durante el resto de la película. Sólo resopló con fuerza en la escena en la que Mark Darcy le dice a Bridget que le gusta "tal y como es".

"¿Qué?" preguntó Hermione, sin levantar la cabeza, "¿No cree que alguien puede querer a alguien tal y como es?"

"No. No lo creo", gruñó él.

"Lástima". Hermione suspiró.

"Tan bonito. Tan ingenuo", le oyó susurrar en voz baja. Sintió que él levantaba su pie y jadeó cuando se metió los dedos en la boca, su cálida lengua recorriendo sensualmente cada dígito. "Dioses, qué bien se siente", pensó. Hermione se dijo a sí misma que sólo lo hacía para burlarse de ella y demostrarle lo ingenua que era, así que rápidamente le arrebató el pie.

"No soy tan ingenua", murmuró en voz baja. Saltó del sofá, murmuró un rápido "buenas noches" y salió corriendo de la habitación.

Vayan a leer Sentido e Insensibilidad