El chico de la librería

CAPÍTULO 9

luego de aceptar la decisión de mi hermano no pude dormir

al llegar al trabajo me diriji a mi puesto pero antes de llegar Carlos me detuvo

–Valeria hoy te toca cubrir caja

–ese puesto es de don Mario y se enojaria mucho si llego y se lo quito

–pues en esta ocasión el te lo agradecerá ya que no va a venir

–¡¿por qué?! , le paso algo verdad

–ayer lo llevaron de emergencia al hospital y me avisaron que te avisara que te quedaras en el puesto de el mientras esté en observación

–pero...¿él está bien?, ¿está estable?, ¿es grave?

–tranquila él está bien, antes de venir fui a verlo y me dijo que ocupará su puesto

–¿y porque no me dijistes?, a mi tambien me importa Don Mario

–por eso mismo no te lo dije,por que te ibas a preocupar

me da un beso en la mejilla y se va

solo una vez e estado en este puesto ya que se encarga don Mario

luego de un dia lleno de libros de romance, miedo, suspenso, y de personas emocionadas y enojadas termina mi turno

pero hoy no vi a Corbyn no lo vi ni entrar ni salir de la librería

al salir me dirigí al hospital donde estaba Don Mario

pase por una dulcería a comprar unos dulces de miel naturales

al llegar me dirijo a la mujer que aparenta de unos 40 años y está en recepción

–disculpe vengo a ver a Mario Ferraro

–con gusto, el esta en la habitación 408, cuarto nivel a la derecha

–muchas gracias

sigo mi camino al elevador, presiono el botón para que la puerta se abra y veo a alguien que no me esperaba ver

–¿qué haces aquí?- decimos ambos al mismo tiempo

reímos, él sale y yo entro al elevador para presionar el botón que me lleve al cuarto nivel

–nos vemos después- se despide y las puertas del elevador se cierran

verlo a mejorado mi dia, después de una noche y un dia agotador verlo me a puesto me feliz

llego y salgo del elevador y ubico la habitación 408

después de encontrarla, toco la puerta y abro

–hola Don Mario, ¿como esta?

–ya mejor y si sigo así mañana me dan de alto y podré salir de aquí

–entonces siga así y para motivarlo le traje unos dulces- se los entrego y no espera nada por que los empieza a abrirlos

Don Mario a veces puede parecer un niños a veces cuando de dulces se trata

-Me preocupé cuando dijeron que estaba en el hospital, ¿qué fue lo que pasó?

–nada hija, solo la edad

lo miro detallando su cara, siempre que estoy triste me cuenta su historia de cómo desde niño siempre había querido una cafetería y cuando se graduó de la universidad nunca tuvo tiempo de empezar de crearla hasta después de 20 años ya cuando estuvo jubilado pudo cumplir su sueño

–no le puede pasar nada, no se que haría sin usted

–cumplir tus sueños, eso es lo que harás

–don mario ¿le puedo preguntar algo?, pero no está obligado a aceptar, claro

– claro, pregunta

miro hacia el piso y juego con mis dedos

–¿le puedo decir abuelo?, ya sabe porque lo considero mi abuelo no que sea uno

–JAJAJA, claro que si seria un honor que me llamaras así y claro que ya soy un abuelo tengo cuatro nietos, no me ofenderia

rio y lo abrazo con el cuidado necesario

lo considero mi abuelo ya que me a apoyado y cuando le pido un consejo el esta ahi dandolo e incluso cuando no se lo pido y se que siempre cuando quiera hablar con alguien lo puedo hacer con el