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Chapter 01❜❜

Bajo la sombra del cerezo❜❜

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Camino por los extensos pasillos de la Universidad rumbo a la Cafetería, mis ánimos están por el suelo hoy; la causa: no he podido encontrar a quien pertenencía la voz de ese chico. Durante tres días he buscado hasta el cansacio, revisé en cada salón cercano al mío y me pasé todo el tiempo en el campus sentado detallando a todos los estudiantes que pasaban por ahí.

Nada, ni una sola vez volví a escuchar una voz parecida.

No quería creer que fue una mala broma de mi imaginación pero al no encontrar ni una pista de ese chico comenzaba a pensar que en definitiva no era real.

Por mucho que negara ese hecho tan verídico y que odiara la idea de que todo fue una alucinación más, no hallaba ningún indicio que me demostraba su existencia.

─HaNeul. ¡HaNeul!

Volví a la realidad al grito de mi única amiga, Jang HeeSook. Esta se encontraba sentada al frente de mí, con su bandeja sobre la mesa y los ojos abiertos como búho observándome. Otra vez andaba sumida en mis pensamientos, ni siquiera recuerdo en que momento tomé la comida y me senté aquí.

Odio mis momentos neblinosos, es como si mi mente se desconectara de mi cuerpo y este vagara sin el menor conocimiento de ello, siendo el subconsciente mi único mundo.

Oh no, está pasando otra vez.

─¿HaNeul? ¿Estás bien?─ volvió a hablarme HeeSook, esta vez preocupándose por mi pequeño aturdimiento

─Ah sí, disculpa. Tengo muchas cosas en la cabeza. ─respondí tratando de convencerla de que todo estaba bien conmigo.

Yo también quisiera convencerme de lo mismo.

─Menos mal, ya me estabas asustando ─dijo suspirando aliviada─, estuve casi cinco minutos llamándote y no dabas en sí.

─Tranquila, la escuela me tiene muy estresada y más con los exámenes a la vuelta de la esquina. ─volví a justificarme a la vez que empezaba a degustar mi almuerzo.

─Ni me digas, yo estoy condenada con Cálculo, vamos a ver como me va. ¿Crees que pueda desaparecerme ante de las pruebas?. ─ preguntó con leve tono de burla

─No creo amiga, nos toca sí o sí.─ respondí y al instante hizo muecas tan raras como si estuviera siendo asfixada y sacando la lengua, era tan graciosa que al final me sacó una sonora carcajada.

─Párale al drama Sooki, ya sabes que cuentas con mi ayuda y que estudiaremos juntas. Todo saldrá bien. ─añadí para tranquilizarla un poco.

─Cierto, que suerte la mía contar con una mejor amiga cerebrito, estoy salvada.─ dramatizó

Rodé los ojos por su extravagancia en gestos y drama y seguí comiendo tranquilamente aún escuchando sus estupideces.

Al levantar la mirada mi ojos divisaron un chico jamás visto por mi, al menos nunca me lo había cruzado en los corredores de la escuela, lo que me asombró es que él también miraba en mi dirección.