Su primer beso ¿como olvidarlo si solo eran unos jóvenes tontos?
Habían vuelto a salir y encontrarse un par de veces asi ya se les hacía común salir ellos solos de vez en cuando aunque sea por un corto lapso de tiempo, ese día no iba a ser una excepción, iban a ir a un pequeño lago que México había encontrado cerca de donde vivían por mera coincidencia.
Argentina se puso, con ayuda, el conjunto más lindo y adecuado para la ocasión, siempre que salía con mexico le pedía ayuda a algún amigo o persona para que le ayudase a escoger algo que le quedara bien y así no verse "ridiculo" frente a la vista mexicana, poco sabia que ante sus ojos usara lo que usara seguiría viéndose tan lindo como un ramito de girasoles.
Cuando ambos estuvieron listos quedaron de verse en el largo, a Argentina no del le dificultó mucho llegar pues ya había comenzado a acostumbrarse a tener que ir solo ya sea caminando o en un medio de transporte, llevaba consigo una mochila pequeña, había "preparado" unos postres, aunque siendo sinceros, los había comprado y el cambio alguna que otra cosa de ellos únicamente y un cambio de ropa por si entraba al agua, México había quedado en llevar algo para beber y más bocadillos.
México llegó primero, cosa que lo alivió hasta que aquellos pensamientos en donde su solecito se había perdido o le habían hecho algo, ansioso miró la hora de su teléfono, había llegado más temprano de lo acordado, trato de relajarse siendo una tarea difícil pues su mente le creaba ideas en donde su chiquito precioso terminaba mal.
Por fin pudo volver a respirar al escuchar el golpeteo del bastón contra el suelo, volteo en dirección a donde venían aquellos sonidos, una sonrisa en grande se formó en sus labios logrando mostrar parte de su dentadura, sentía como sus ojos eran bendecidos al tener en frente al del sol en su bandera, parecía un ángel, un ángel al cual quería abrazar para siempre y mantenerlo con él para poder protegerlo del mal.
—Arge! Unos pasos más, precioso!— alzó un poco la voz para que el chico le escuchara, él verlo sonreír y apresurarse hacia donde él estaba fue un golpe directo y sin escala a su corazón.
Argentina había llegado con el regalándole un "Hola, México" con más alegria que otras veces, ya se había acostumbrado un poco a los apodos que el mexicano le daba pero eso no quería decir que no le hicieran morirse por dentro de la ternura y los nervios.
Ambos jóvenes emprendieron camino a donde tomarían asiento y se quedarian, iban a pasar un rato agradable.
—¿Neta hiciste esto tu, corazón?— dijo el mexicano con la boca algo llena debido a los bocadillos que había traído argentina, le miraba con asombro.
—Bueno, digamos que yo solo los arregle un poquito, los compre en una tiendita, quería traer algo para ambos— agacho un poco su cabeza sintiendo sus pómulos arder ante la vergüenza de haber confesado su "horrible crimen".
México río enternecido ante su reacción yendo a abrazarlo y estrujarlo entre sus brazos logrando que soltara algunos quejiditos seguidos de esa linda risita que tanto adoraba escuchar, hizo su agarre más débil pero sin llegar a separarse por completo de su sol, le gustaba tenerlo cerca y poder sentir ese aroma a fresitas frescas que el joven emanaba.
El resto de la tarde se dedicaron a platicar y a arrojar piedritas pequeñas al lago, habían acordado no meterse pues parecía que más tarde haría frío y ninguno quería enfermarse, sería para la próxima.
Argentina recargó su cabeza en el hombro de mexico aprovechando que estaba sentado a un lado de el, suspirando con pesadez al hacerlo, mexico al percatarse de eso volteo a verlo preocupado de que algo le estuviese pasando pero su preocupación se esfumó al verle sonreír como si estuviese pensando en algo que realmente le agradaba o pasando un buen momento.
Ante eso México ya no pudo resistirse, necesitaba llenar a su chiquito de besitos, aprovecho la cercanía de ambos y tomó de las mejillitas al argentino quien solo volteo a verlo con extrañeza, casi se desmaya al sentir unos labios contra los suyos, sabía que eran los del mexicano pero no creyó que se atrevería a hacerlo, al menos no tan pronto, había fantaseado un par de veces con aquel momento y ahora que pasaba simplemente se había quedado en shock sin saber cómo responder o que decir.
México lo miró con cierta duda, temía por qué el joven le hiciera algo o terminara con su amistad, cosa que no sucedió ya que Argentina buscó con sus manos el rostro del chico mexicano y al encontrarlo lo acaricio con sutileza.
Sin dudas era un momento adorable para ambos, aquellos sonrojos en sus mejillas y ganas de volver a besarse estaban presentes, mexico rodeo con sus brazos a argentina abrazándolo y dejando pequeños besos por todo su rostro.
Estaba enamorado de su solecito pintor.
Actualización¿ siuuuu
Probablemente mañana o más bien, en un rato suba otra, no prometo nada 👀Banda, me vi hearstopper y llegué a la conclusión de que necesito un Nick.
Buenasnoches
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El chico de ojos bonitos- mexarg
FanfictionArgentina, un hombre que quedó ciego después de un aparatoso accidente que tuvo de joven. Mexico, el hombre perfecto para muchos, un hombre atento y cariñoso. Mexico quedó fascinado con argentina desde la primera vez que lo vio, estaba decidido a ha...