La Ascensión del Mortal más Fuerte

Capitulo 39: Uzushiogakure en peligro.

"¿Entonces?, ¿me puedes explicar por que estabas durmiendo con la abuela Mito?". Tsunade pisaba el suelo con impaciencia mientras miraba peligrosamente a las dos personas que estaban frente a ella en seiza.

Jin tragó saliva ante la mirada de la mujer furiosa frente a el y miró a Mito en busca de ayuda. Sin embargo, cuando la miró, ella esquivó su mirada y juró ver una sonrisa. Claramente disfrutaba lo que le está pasando. Sabiendo que no tendría apoyo en esto, miró nuevamente a Tsunade.

"B-b-bueno, estaba templando su cuerpo y luego nos pusimos a meditar ... Sinceramente no sé que pasó después. Probablemente me quede dormido mientras meditaba y caí con ella". Se maldijo por tartamudear, también maldijo la suerte que tienen los Saiyans de gustarle a las mujeres fuertes y rudas.

No lo quería admitir pero sinceramente Tsunade actualmente se veía sexy a pesar de la situación actual. Estaba vestida con una blusa a la medida que estaba hecha de malla metálica delgada para adaptarse a las líneas de su cuerpo junto a a su colgante que le regaló su abuelo, una minifalda violeta oscuro haciendo que pueda ver sus exquisitas piernas. También tenia las típicas sandalias shinobi y su protector de frente.

Tsunade entrecerró los ojos peligrosamente y Jin se preguntó por que solo a el. "La abuela no estaría contigo por eso no le hablo a ella". Al escuchar las palabras de la rubia, se preguntó como carajos ella pudo ver a través de el. Sin que ninguno de los dos se diera cuenta, la sonrisa de Mito se desvaneció ante el comentario.

*Suspiro* "¿Quieres que me acueste contigo?". Jin sonrió al ver la cara sonrojada de Tsunade y el como balbuceaba. "Te entiendo, al parecer son celos, no te preocupes estaré contigo esta noche". Le guiñó un ojo y recibió un puño en su cara mandándolo a la pared detrás de el.
"Jaja, que tierna". Se agachó para esquivar otro golpe y rodó por el suelo mientras esquivaba los intentos de ella por pisarlo. Justo cuando alzó su pierna para golpear nuevamente, Jin sangró por la nariz al ver su ropa interior que obviamente, estaba debajo de su minifalda. "Es roja ...". Tsunade se detuvo con su pierna alzada todavía y repasó el comentario de la pobre víctima. Miró su posición y se sonrojó. "¡¡BASTARDO!!".

"Kyaaa~". Jin fue pateado y su pobre cuerpo salió volando como un misil, fuera del complejo Senju.

- Oficina del Hokage -

Tobirama estaba hablando con Hiruzen, y frente a ellos estaban: Orochimaru y Jiraya, quienes fueron llamados para una misión. A juzgar por la expresión de seriedad que tenían, la misión debía de ser sería. Sin embargo, el ambiente serio fue roto cuando la ventana del lado izquierdo de Tobirama fue rota por un misil de cabello púrpura. Todos se pusieron en guardia menos Tobirama, quien veía al misil con una ceja alzada.

"¿Me puedes explicar como fue que llegaste de esa forma?". Preguntó y los demás se relajaron al ver la actitud de su Hokage.

El aparente misil se recompuso y se frotaba la cabeza. "Viejo, tu nieta golpea duro". Se quejó y rápidamente vió a los demás. "Oh, Orochi, Jiraya, ¿como han estado?". Ante la evasión de la pregunta que hizo Tobirama, todos tuvieron una gota de sudor detrás de su nuca.

"Jin-kun". Orochimaru asintió en respuesta. "¡Amigo mío!". Jiraya fue más ruidoso en responder. Se acercó, abrazó a Jin y se alejó. "¿Como es que entraste de esa manera?, Aunque fue grandioso". Se rió entre dientes. "Bueno ...". Jin contó lo sucedido y cuando terminó vió que Tobirama tenía el ceño fruncido, Hiruzen una sonrisa, Orochimaru parecía estoico y Jiraya tenía sangre en la nariz. "¡MALDICION, QUE SUERTE!". Jiraya gritó y Hiruzen le dió un zape a su alumno y le dijo que se comportara. "Pero ¿¡por que a mi y no a el!?". Señaló acusadoramente al aparente suertudo con las mujeres, según sus pensamientos.