llamado de la naturaleza

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Desde que tengo memoria los animales me han amado, no importa si era un mapache robando comida o hasta el peligroso perro del vecino siempre que aparecía yo estos se volvían más dócil.

Podía entenderlos no necesitaba hablar simplemente sus voces llegaban a mí mente y podía entender, desde el canto de los pájaros hasta el canto del grillo podía entender lo que me decían; me era más fácil estar con ellos los humanos me hacen sentir asfixia, incomodidad como si no hablara el mismo idioma.

Estoy sentado en un árbol rodeado de animales son mis únicos amigos y los únicos que realmente quiero.

- Entonces mi esclava tomo a mis bebés y los entrego a este hombre - me contaba laddy mermelada la gata de una viuda que vivía a dos casas de la mía.

- Posiblemente solo los dio en adopción no hay porque pensar en algo malo - contesté acariciando la oreja derecha  de un sabueso que tenía a mi derecha

- Rasca mi panza - me ordenó, yo solo sonreí e hice lo que me pidió solo con ellos podía estar en paz libre de Tobías de la indiferencia de mi madre y los murmullos de los vecinos, entonces una voz irritante llamo mi nombre.

- Sev, sev te estuve buscando ,¿Porque estas aquí y rodeado de estos sucios animales?  - me preguntó Lily Evans una niña pelirroja Compañera de clase   que en algún momento se autoproclamo como mi mejor amiga, abrazo un pequeño conejo y la observó hablar  no entiendo lo que dice no logro conectar con ella , no se porque me habla , es extraña ,porque no me deja, siempre pienso eso cuando ella me habla sin cesar , soy bueno fingiendo , así que sonrió de lado y asiento a lo que dice como si me importará lo que dice, ella sonríe y besa mi mejilla para luego irse saltando.

- ¿Realmente vas a cumplir lo que prometiste? - me dijo bigotes un pequeño gato callejero al que le faltaba un ojo

- De llevarte a casa y tomarte como mi mascota si - le dije seguro de mi respuesta.

- no no sobre , acompañar a esa mocosa a comprar cosas mágicas a ese callejón - hablo cedric el conejo en mi regazo.

-¿yo prometí eso ? - pregunté curioso ya que no había registrado nada de la conversación, pero supongo que lo hice, esa era otra cosa Lily tenía magia igual que yo mi madre se había enterado y le contó sobre el mundo, ella estaba feliz de que pasara el tiempo con un niño mágico en lugar de estar en la casa.

Miro al cielo y suspiro cuando el sol se oculta eso significa que debo volver a casa a escuchar los ruidos de Tobías y los llantos de mi madre, me levanto con bigotes en mis hombros para caminar en dirección a mi casa , ignoró a todos en mi casa  y camino a mi habitación ahí cierro la puerta para acomodar a bigotes en su cama pero el pequeño felino salto a mi cama y se adueñó de ella , solo me río ante sus acciones.

La noche paso rápidamente y un nuevo día llegó le di un plato de leche a bigotes y me vesti lo mejor que pude para acompañar a esos humanos a comprar cosas, llegamos al callejón diagon guiados con la profesora Mcgonagall por alguna extraña razón podía entender lo que decía  aunque su voz tenía una acento escosés muy marcado deje escapar una pequeña risa ante las cosas que decía.

- ¿Algo gracioso señor ... Snape ? - me preguntó mirándome directamente a los ojos, incline la cabeza no sabía que decirle así que me quedé callado como siempre a mi izquierda Lily soltó una risa.

- Disculpelo maestra sevi es algo tímido y no suele hablar  pero es muy inteligente - hablo suavemente ella.

Dejo de prestar atención a lo que ellos dicen y comienzo a escuchar a los animales en las tiendas , eran tantos tan ruidosos tan felices por ser comprados entonces lo escuché un pequeño grito de ayuda.

- Ayuda ayuda me quieren matar ayuda alguien no quiero morir  - algo en mi corazón se aceleró y salí corriendo no sabía las tiendas pero seguí el frío ahí la encontré una pequeña hada apunto de ser convertida en polvo , sin saber que hacer empujé al vendedor y sujete al hada.

- Estas bien nadie te va lastimar nadie te volverá a tocar - contesto al pequeño ser en mis manos que temblaba con miedo , claro al final fui regañado y castigado pero valió la pena salve una pequeña hada que me siguió hasta hogwarts.

Hablando de hogwarts en mi primer año después de la clasificación donde quede en Slytherin comencé a escuchar voces  todo el castillo hablaba me gritaba para jugar con él, así que lo hice ignore a los humanos a mis compañeros simplemente deje que las voces a mi alrededor cantaran en mi oído , jugué con los animales y deje que las criaturas  trenzaran mi cabello con flores y decorarán mi uniforme con pétalos o regalos, mi extraña apariencia era juzgada claro que lo sabía los animales y el mismo hogwarts Melo decían pero que importaba nunca me había sentido tan feliz en mi vida.

Fue en mi segundo año cuando el maestro Silvanus Kettleburn junto con su asistente Hagrid nos llevaron a conocer a algunos unicornios yo estaba emocionado unicornios nunca había estado cerca de una criatura mágica tan increíble.

- deseo tocar uno - hable suavemente lleno de emoción

-Me temo señor snape que los unicornios solo se acercan a los seres de corazón puro y en su mayoría son mujeres - hablo Hagrid dejando escapar una risa , será porque es un medio gigante que puedo entender lo que dice pero no le dejo apagar cuando los unicornios aparecieron rápidamente fui rodeado por ellos podía sentir la mirada de todos pero sobre todo de esos chicos llamados los merodeadores y yo solo les d volví la mirada.

-Toca mi crin
- Dame una manzana
- Toca mi costado

Me decían los unicornios así que lo hice ignorando que estaba rodeado de humanos me deje llenar por el llamado de la naturaleza deje que mis sentidos hablaran así que hable con ellos les dije cosas.

- Señor snape puede en tender lo que ellos dicen ? - pregunta el maestro Silvanus Kettleburn  pero yo no entendí lo que decía no hasta que el alfa de la manada de unicornios me dijo así que asentí.

- si profesor puedo hacerlo lo he hecho desde que tengo memoria ma es más fácil entender lo que dicen que a los humanos - contesto volteando mi cara para poder verlo directamente a los ojos,  al maestro le faltaban algunos miembros y su cabello blanco caía sobre uno de sus ojos mientras estaba concentrado en el no sentí la mirada esperanzada de uno de los merodeadores.

Adorable SerpienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora