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Mientras era escoltado al comedor por el hombre que habia entrado en su habitacion, Derian no pudo evitar notar que los pasillos eran realmente gloriosos, llenos de decoraciones delicadas y costosas que cualquiera se sentiría impresionado al observar, pero Derian solo se sentía intimidado ante el esplendor del lugar, así que intentando ignorar todo lo que lo rodeaba, incluyendo al hombre que lo guiaba, se concentro en caminar por los largos pasillos, hasta que pareció llegar a una puerta donde su guía se detuvo.

Sin pensarlo mucho ignoro al hombre y entró pensando que no tenía otra opción, al menos hasta averiguar lo que realmente estaba pasando.

El comedor a diferencia de los pasillos poco iluminados, estaba mejor iluminado y tenía una mesa de cristal de vidrio. Sentado en el final de la mesa se encontraba un hombre de cabello rosa, el cual vestía muy similar a el, aunque en su cabeza en vez de un tocado para el cabello se encontraba una corona negra.

Derian dudo en acercarse por un momento pero la persona dentro de la habitación pareció notarlo y lo invito  a pasar con un ademán de su mano, no queriendo molestar a nadie y menos estando en el cuerpo de otra persona,  decidió obedecer la indicación y se acercó, repitiéndose una y otra vez en su mente, que tenía que actuar como un niño si quería sobrevivir.

Aunque sus pasos fueron lentos pronto se encontró frente al hombre observándolo atentamente pero nunca se espero que el hombre tocara su cabeza con cariño mientras le sonreía.

–Querido hijo has tardado más que de costumbre en llegar–. Derian quedó en shock ante las acciones del hombre , pero recordando que ahora estaba en el cuerpo de un niño asi que sonrió lo más tiernamente posible.

–Lo siento padre, simplemente tuve un mal despertar pero ya estoy bien–. La mirada del hombre se torno preocupada pero no dijo nada.

–Bien lo mejor es que te sientes a comer para poder empezar con tus lecciones del día –. El hombre guió a Derian hacia la mesa.

Derian se sentó y espero pacientemente a los sirvientes mientras estos servían la comida. Inmediatamente al verlos servir Derian se avergonzó por haber retrasado su trabajo al bajar tan tarde, cuando ellos se tomaban el tiempo de servirles y se prometio no volver a tardar, al menos hasta que su peculiar situación se resolviera. Los sirvientes terminaron de servir la comida y padre e hijo comenzaron a comer.

El padre de Derian noto que la actitud de su hijo era extraña, el niño siempre había sido alegre y algo caprichoso pero nunca había estado tan silencioso. Era la primera vez que lo veía tan callado durante una comida. Sólo esperaba que no estuviera enfermo.

Derian se sintió incómodo ante la mirada de su padre pero continuo comiendo lo más tranquilamente posible.

–Delyan–. Su padre llamó su atención con un ligero tono de voz casi como si tuviera miedo de preguntar
–Tus clases comienzan hoy se que no estas deacuerdo, pero hace tiempo que debiste haber comenzado con las lecciones apropiadas para ti, así que espero asistas y no me hagas las cosas difíciles–. Derian notaba como su padre intentaba razonar con el y por un momento casi se ríe al recordar, el temperamento del Delyan original. Su "padre" parecía demasiado dócil como para lidiar con alguien de tan mal carácter como el.

–Claro padre prometo no decepcionarte–. Sus palabras estaban rodeadas del aire bromista que lo caracterizaba desde hace un largo tiempo.

El hombre sentado enfrente de Derian por el contrario penso que su hijo se veía muy enfermo, casi como si estuviera a punto de desmayarse y posiblemente por su estado debilitado sus palabras habían sido tan diferentes a la continua actitud arrogante de su hijo. Claro que era una sorpresa bienvenida en especial después de estar esperando una gran rabieta de su parte.

Después de salir del estado sorprendido, en que lo había dejado su hijo. El emperador Cassander sonrió calidamente y se puso realmente  feliz al notar el gran cambio que había tenido su hijo, despues de todo era el culpable por haberlo consentido tanto y eso lo hacia sentir culpable.

–Bien entonces le ordenare a alguien que valla a buscarte para que puedas presentarte con tu nuevo profesor–.

Dejando de lado todo el humor que su pequeña broma había causado Derian se arrepintió de no haber echo un gran berrinche en vez de una broma, porque ahora que se ponía a pensar más claramente en las cosas, había comenzado a darse cuenta de que las leccione posiblemente serian más difíciles que una simple lección de matemáticas, y es que Derian muy bien sabía que lo que le enseñarian sería para gobernar un país y el no quería saber nada al respecto, ni siquiera pretendía gobernar un país. Pero era claro que no podria cambiarlo y no quería llamar la atención sobre si mismo.

Moviendo los pies mientras estaba sentado acepto su destino y se levanto de la mesa pero en cuanto se levantó tres sirvientes se acercaron inmediatamente a él preguntándole que a donde iría, o si quería regresar a su habitación. Derian se sentía agobiado pero sin querer ser grosero les contesto educadamente y cuando menos lo espero estaba en el jardín pensando en lo que haría a continuación, despues de todo si lo que estaba viviendo era real y no parte de su imaginación o de un sueño extraño  por haber quedado en coma gracias a la falta de sueño, entonces su futuro no parecía tan brillante, no por nada el, o más bien Delyan, había sido tan cruelmente asesinado por el protagonista.

Afortunadamente los sucesos de la muerte de Delyan estaban muy lejos de suceder y Derian todavía tenía la oportunidad de evitar su muerte pensando en eso tal vez si comenzaba a tener una amistad con el protagonista podría evitar ser quemado vivo en el futuro por el protagonista. Derian no sabía si podía evitarlo pero haría todo lo posible por sobrevivir y regresar a su mundo, no tenia mucho en ese lugar pero al menos tenía una buena vida, en cambio siendo Delyan su futuro era desconocido y eso comenzaba a preocuparle.

Pero Derian no tenía tiempo para preocuparse por eso, el tenía mucho que aprender sobre su nuevo mundo, y lo mejor sería empezar por el lugar donde una parte del conocimiento, de todo lugar se guardaba, solo esperaba que la biblioteca fuera facil de encontrar, aunque teniendo en cuenta el tamaño del palacio tal vez no tendria suerte al menos si lo hacia solo, así que se dirigió rápidamente a un sirvientes.

–¡Oye tu!–. Derian se dirigió entusiasta a un chico que se encontraba sosteniendo una canasta con lo que parecía ser ropa sucia. Sabía que su lenguaje había sido muy informal pero en ese momento no se preocupo en lo más mínimo.

–¿Si?, Joven Delyan–. El chico parecía muy asustado y apenas pareció poder responderle.

–En donde esta la biblioteca–. Ante sus palabras el joven parecía realmente desconcertado y su expresión casi hace reír a Derian.

–El... El joven Delyan no sabe donde esta–. El sirviente parecía estar apunto de tener una crisis nerviosa pero aún así se mantuvo firme para poder contestarle a su amo.

–No lo recuerdo–. Derian hablo y se río ligeramente por toda la situación.

–Este humilde siervo podría llevarlo–. Al escuchar las palabras del joven. Derian estuvo deacuerdo y acepto que le indicara el camino.

Entre más pronto comenzará a estudiar sería mejor, después de todo tenía que sobrevivir a este mundo.

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Bueno uno más la verdad es que espero con ansias las vacaciones pues no he tenido tiempo de publicar por la Uni y espero poder hacerlo más seguido una vez que tenga un tiempo de descanso.

Eiverils-Black.

Cambios mínimos.
16– Julio –2023


Quiero vivir por siempre contigo [BL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora