Verano en USA (Satzu & more ships)

VII. Feliz Cumpleaños

Saliendo de Seattle, Washington

Nayeon POV

Luego de que compré ese maravilloso Wonderbra en Port Angeles, seguimos nuestro camino. Ahora estaba anocheciendo y Mina había dejado que Solar condujera. Pues bien, Tatiana de Drag Race diría: "We all make choices, but that was a choice". La loca esa no conduce muy bien digamos, cuando salíamos de un pueblecito llamado Edmonds por poco casi atropella a una chica que le gritó hasta del mal que se iba a morir.

—Solar, querida – dijo Mina con voz suave—. Yo puedo volver a conducir.

—¡No! Me gusta este auto, conduciré hasta que salgamos de Washington – sonrió—. Ustedes descansen.

Íbamos a morir. Sí, no íbamos a llegar a Dakota del Norte bien.

Miré por la ventana y vi a un grupo de personas que celebraban un cumpleaños en un pequeño terreno. ¡A mí me encantan los cumpleaños! ¡Teníamos que parar!

—Solar, para – le dije.

—¿Por qué?

—Miren allí – señalé al cumpleaños-. ¡Es un cumpleaños! ¡Tenemos que parar!

Solar no lo dudo ni un instante. Estacionó el auto a un lado de la carretera. Tomé mi walkie talkie y le hablé a Jackson.

—Oppa, estaciónate. Tenemos cumpleaños.

—¡SIIIII! – gritó emocionado.

En ese momento, Momo paró el Jeep al lado de nosotros...

—¿Qué sucede?

—Habemus cumpleaños – canturree felizmente.

Jeongyeon sacó su mochila del maletero y tomo una pistola nerf gigante.

—Si no nos dan pastel por las buenas, nos darán por las malas.

—Pero ¿qué coño? Primero salimos a Nueva York y ahora invadiremos un cumpleaños, ¿En serio? – gritó Sunmi desesperada.

—Quiero pastel – dije simplemente.

—Nayeon, podemos parar en una repostería – dijo Jihyo.

—Yo opino que deberíamos ir, felicitar al cumpleañero y comernos ese pastel – dijo Mina luciendo toda inocente.

—Así se habla, sexy pingüino– dijo Chaeyoung sonriéndole a su novia.

Momo estacionó el Jeep y todos nos dirigimos al cumpleaños. Un señor con sombrero nos detuvo.

—¿Quiénes son ustedes? – entrecerró los ojos.

—¡SOMOS AMIGOS DEL CUMPLEAÑERO!

El señor nos miró raro.

—¿Amigos de Frodo?

¿Se llamaba Frodo? Vi como Momo y Sana se tapaban la boca para no reírse.

—¿Y dónde se conocieron?

—En la escuela, señor — dijo Chaeyoung seriamente. Jeongyeon cargó la pistola.

—Mi nieto Frodo está en el jardín de niños.

Oh...

—¡Por eso! – dijo Wheein—. Mi hermano Jackson actúa como si fuera un niño de 4 años... Un golpe en la cabeza ya sabe y está en el jardín de niños, con Frodo.

Momo le dio un manotazo en la cabeza a Jackson y éste comenzó a actuar como si fuera un niño. El hombre entrecerró los ojos. Jeong le apuntó en la cabeza con la nerf.

—Déjenos pasar, viejo – dijo mi Jeong amenazadoramente.

Dios creo que me mojé.

—No, charlatanes.

—Usted lo pidió.

Le disparó justo en el ojo derecho, yo aplaudí. Todos entramos.

Sunmi POV

Jeongyeon le disparó en el ojo.... ¡EN EL OJO! ¡A UN ANCIANO! Y luego entraron cual vikingos o piratas a la fiesta de un niño de 4 años que tiene el nombre del protagonista del señor de los anillos.

Mi novia me miró.

—S, salgamos y si viene la policía o algo escapamos sin ellos, ¿de acuerdo?

Pero en ese momento oímos un grito.

Entramos a la carpa donde estaba la fiesta.

Sana lloraba en una esquina gritando que extrañaba a Tzuyu.

Momo y Chaeyoung bebían refresco como si no hubiera mañana.

Nayeon saltaba con un niño en brazos mientras éste gritaba, la madre del niño la perseguía.

Mina era la que había gritado, un gran hombre corpulento bailaba pegado con ella mientras tenía las manos en su trasero, ahora ella se reía.

Jeongyeon lanzaba cubos de hielo gritando: "NIEVE".

Jackson y Wheein robaban comida y, finalmente Solar y Moonbyul estaban metiendo el pastel en una neverita.

Miré a Jihyo boquiabierta, pero no se encontraba a mi lado, sino que se había acercado a un grupo de ancianas y estaba discutiendo de moda con todas ellas.

Era ridículo, solté un suspiro y me senté en una silla a esperar que terminaran.

Volando cerca de Japón

Irene POV

Ahora nos encontrábamos entrando a Tokyo, allí íbamos a tomar un vuelo directo a Nueva York. El avión dio un frenazo y una chica que venía caminando se cayó.

—¿Estas bien? – pregunté mirando y ayudándola a pararse.

Miré a Seulgi, ésta ni siquiera se había dado cuenta del frenazo y mucho menos de la caída de la chica, ya que estaba profundamente dormida.

—Sí, gracias – sonrió amablemente-. Soy...

En ese momento el piloto dijo que el avión se le picho una goma y que tendríamos que aterrizar en Osaka.

—Ji-woo– gritó otra chica, se acercó-. Al avión se le descompuso un neumático.

Esa chica estaba histérica. Ji-woo le sonrió.

—No te preocupes, Joy, llegaras a tiempo, no es como si Wendy te fuera a dejar o algo así.

Joy fulminó con la mirada a Ji-woo.

—¿Qué pasa? – preguntó Seulgi.

—El avión hará un aterrizaje de emergencia en Osaka— dijo Joy cortantemente.

—¿Qué? Pero debo llegar lo más pronto posible a Nueva York– dijo Seulgi con el ceño fruncido.

-—Yo también – dijo Joy, quien sacó una botella de whisky y bebió de ella—. ¿Quieren?

—No, gracias – dije yo, las otras también negaron.

—Soy Ji-woo.

—Yo soy Irene y ella es Seulgi– señale a Seulgi, quien ni siquiera nos miró.

Joy ya había dejado la conversación de lado, mientras se dirigía a su asiento.

—Aquella es Joy y es mi prima.

En ese momento el avión se preparó para aterrizar. Ji-woo se dirigió a su asiento y tras unos minutos nos encontrábamos aterrizando forzosamente en Osaka. Y estaba lloviendo. Mi maquillaje y peinado iban a estar arruinados.

¡Lo que hago por amor!

Seh, seh, volví. Necesitaba quitarme un poquito del estrés del trabajo, y aquí estoy, actualizando antes de irme a mimir. Duerman bien, criaturitas de la creación. Y pues, los que quieran, diganme que opinan y si tienen ideas. Yo escucho! O leo... ay, dios, ustedes entienden.