𝑺𝒆𝒈𝒖𝒏𝒅𝒐 𝒂𝒄𝒕𝒐

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Kagome fue a una tienda ya que se había percatado que sus zapatillas de ballet estaban desgastadas. Mientras compraba unos nuevos, se topó con un chico muy apuesto en aquel lugar. Él era alto, de hombros anchos, largas piernas, de ojos dorados, cabello largo muy blanco y cuerpo bien trabajado. Nunca había visto un chico así físicamente.

En su escuela solo participaban mujeres, se le hacia raro ver un chico en ese lugar o también practicar esa misma disciplina.

Toda la vida se dedicó a estudiar, sus amigas le decían que saliera para conocer gente o tal vez el amor de su vida, pero para ella sus estudios era mas importante que otra cosa en aquel momento.

Poco a poco se le acercó a él, ella tenía mucha curiosidad a qué escuela de ballet pertenecía o si de alguna u otra forma se lo compraba a un familiar o a su novia. Que quizás posiblemente tenía.

Cualquier respuesta que fuese, la pelinegra quería. Aunque ella no sabía la manera de llegar a esa pregunta.

----- Disculpa... ---- llamó la chica tímidamente.

----- Por tu mirada me parece que se te hace raro ver un chico en este sitio. ¿No es así? ----- le sonrió aquel chico.

----- S-Si ----- balbuceo la pelinegra.

---- Mi nombre es Inuyasha Taisho y ¿el tuyo? ----- sonreía el chico.

----- Mi nombre es Kagome Higurashi. ----- sonriéndole sonrojada al mismo tiempo.

----- Vine aquí por algo para mí, ¿practicas tambien esta disciplina?-----

La respuesta que ella quería fue muy rápida. Ese muchacho era muy extrovertido y elocuente.

----- Así es!!! -----

----- Vaya, que bueno!!! -----

Ella era inexperta hablando con muchachos y uno tan apuesto como él, le hacia sentir un poco tonta, inexperta, apenada pero al mismo tiempo algo positivo, raramente feliz.

Extrañamente hablaron por largos minutos como si se conocieran toda la vida, hasta que finalmente cada quien debía irse a casa.

Salieron del lugar y se despidieron. Ambos tomaron su ruta que quedaba en dirección opuesta.

Ya llevando unos cuantos metros lejos del otro. Ella se detuvo y miró hacia atrás para ver aquel chico guapo una vez más, finalmente quitó la mirada.


Por otro lado, segundos después de ella aquel muchacho hizo lo mismo, este sonrió y siguió su camino.

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"Llegará un amor tan perverso como tus pensamientos y tan tierno como tu sonrisa"-Vogard Pastelin🌹

𝑬𝒍 𝒄𝒊𝒔𝒏𝒆 𝒏𝒆𝒈𝒓𝒐 𝒚 𝒆𝒍 𝒂́𝒏𝒔𝒂𝒓 𝒃𝒍𝒂𝒏𝒄𝒐 (𝑰𝒏𝒖𝒙𝑲𝒂𝒈)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora