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-¡Yo quiero la recamara mas grande!-gritamos todos al unísono.

-¡aguarden un momento!- grito mi mama con aires de superioridad- esto no es tema de discucion- nos miro mientras tomaba su maleta y un estuche, dio vuelta hacia las escaleras y antes de echarse corriendo a subir los escalones dijo- soy la mama, y yo digo... ¡QUE ME TOCA A MI!.

Subió mientras reía y todos tomábamos nuestras cosas y subíamos quejándonos.

La casa era muy bonita y, a excepción de la recámara principal, todas las recamaras tenían el mismo tamaño.

Raúl tomo la recamara de abajo, Melissa la de alado de mama, Adriana la de enfrente de la de Melissa y yo tome la de arriba, en el tercer piso, a lado del cuarto de lavado.

Mi recalara tenia una linda vista de muchos arboles y tenia una terraza. Que se ve que la dividieron de la azotea para tender ropa.

Puse mis maletas en una esquina y baje por la base de mi cama y el colchón, el cual le ayudo a subir Raúl pusimos todo en otra esquina.

Hababía una sabana la cual jale y vi que era una puerta de madera. Entre y vi que era un armario que desembocaba a un baño propio.

¡Esta recamara es un sueño!. Pensé.

Baje por todo lo que me faltaba y ¡Gracias a Dios! Que tengo un armario si no, no me cabria todo.

Termine de arreglar mi recamara que tenia las paredes de un color azul celeste (¡Gracias a Dios, por que odiaba el rosa!),
que queda presioso con las tonalidades cafe-madera de mis muebles y las sabanas azul marino de seda con el enredon blanco y almohadas y cojines de ambos tonos (que fueron regalos de mi abuelita cuando cumplí 17 por que no encontraba sabanas para "señoritas" que me gustaran para una cama matrimonial).

Y mire hacia la terraza que estaba bacía, mire la hora y apenas eran las 4:30 p.m. y me dispuse a salir para ir a comprar cosas para adornar.

Estaba por salir cuando Raúl me detuvo.
-¿A dónde crees que vas?

-A comprar madera reutilizable, llantas usadas, unas macetas con plantas y una sombrilla ¿Por?

-¿Y ya pediste permiso?

-¿Me das permiso, papi?- le dije mientras le hacia "ojitos".

-Jajaja solo si dejas que te acompañe.

-Esta bien ¿Sabes si mama me regresara mi pantalla, mi estéreo y mi dvd?

-No lo se, solo se que están en casa de la abuela, tendríamos que ir por ellos. Pero ¿Vamos por tus cosas o por tus aparatos?

-Por mis aparatos.- Dije sonriendo mientras salia con las llaves de la camioneta y se las aventaba.

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