𝐂𝐨𝐫𝐚𝐳𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐞𝐧 𝐠𝐮𝐞𝐫𝐫𝐚 (Frui/Shalt)

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La situación se había tornado increíblemente tensa. Frente a él, yacían tanto Shu como Valt de brazos cruzados, con marcas rojas en sus mejillas por el recién puñetazo que les había reiniciado la vida, exigiendo una explicación claramente ofendidos.

—Si lo pensamos fríamente, no fue para tanto—se excusó Free, aún insistiendo en que la culpa no sólo recaía en él. Una parte suya quería pensar que Lui había influido en ello al seguir con su absurdo plan de ignorarlo todas aquellas semanas.

Pero otra también era sumisa, aún más cuando el Aoi lo miraba de una forma tan fría y apática, y bueno, Shu más que nada suplicando que alguien le explicará lo que estaba sucediendo, porque con el tema de Lane, poco tiempo tenía para meterse en asuntos ajenos, y apenas se iba enterando de que ya era partícipe indirectamente desde hacía mucho tiempo, de las tonterías del rubio.  

—¿No fue para tanto? —Valt se indignó al escuchar aquello—. ¡Eres un idiota, Free! ¿En qué demonios estabas pensando? ¿Creíste que no nos daríamos cuenta?

—Vamos, tampoco fue tan grave… digo, pudo haber salido mucho peor.

Ambos señalaron su mejilla.

—Detalles—restó importancia Free.

El albino tuvo que intervenir a partir de aquí, más que nada porque, de no hacerlo, Valt hubiera cometido su primer pecado después del hecho de ser demasiado hermoso para este mundo.

—¡No me vengas con eso, Free de la Hoya! ¡Intentaste besar a Shu! —exclamó en alto, acusando al chico que estaba enfrente, y que a pesar de la reciente declaración no parecía inmutarse al respecto.

Ni siquiera arrepentido se mostraba lo cual, no era nuevo en lo absoluto.

Shu se sorprendió por ello, soltando a Valt al tiempo en que este daba un paso en falso y caía de bruces al suelo, sumando otro moretón a su nueva y recién inaugurada, autoría de Lui, colección de heridas. 

—¡¿Intentaste besarme!? —ahora gritó el albino, desconcertado—, ¡¿Por qué…!?

Free estaba por decir algo acerca de eso, pero las palabras no salieron de su boca. ¿Qué se supone que diría? ¿De verdad tenía forma de justificarse? Ahora qué meditaba esa pregunta, ¿Por qué? ¿Por qué lo había hecho? Tal vez porque se sintió acorralado desde el momento en que Lui lo comenzó a ignorar, tal vez porque intentó convencerse de que aquello no era más que un leve capricho, tal vez porque desde que todo eso pasó se había estado comportando como un crío inmaduro, tal vez porque le había molestado que Lui ya no quisiera pasar tiempo con él, ¿Eso siquiera era pasar tiempo? La verdad es que para Free sí lo era, y que de repente lo "cambiará" por alguien más había sido el colmo que reventó la poca paciencia que tenía… 

Diablos.

Definitivamente era un idiota.

Valt se puso de pie después de eso, con ayuda de Shu, pero no se retiraron, porque aún si no iba a disculparse con ellos, ambos merecían una explicación de lo sucedido. Aunque Valt ya conocía el contexto, simplemente deseaba oírlo directo de la boca de Free, si quería dormir tranquilo esa noche.

—Yo quería…—comenzó el rubio después de un rato, con los ojos bien abiertos, observando sus manos. Claro está que ahora no tenía cara para verlos, la vergüenza reinaba en sus acciones y palabras, y lo ahogaba con la fuerza de un océano—, quería su atención…

—¿Acaso tienes tres años o qué?

Valt le soltó un pequeño codazo a Shu.

Free decidió ignorar eso, y prosiguió.