Codicia

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Tres meses desde que Draco fue declarado inocente, y desde entonces ninguna noticia de él, de sus padres o de sus abogados, era como si los Malfoy hubiesen desaparecido de Londres dejando al Ministerio y al Wizengamot la incertidumbre de ser requeridos por el Consejo Mundial de Magia para dar las razones del trato que la familia ejemplo de la pureza de sangre había recibido.

Otro que se encontraba igual o peor era el heredero Black, Harry desde que se dio la sentencia de Draco, se hizo cargo de revisar cualquier comunicación de índole legal que llegase a Black & Red y sus sucursales, al igual que mantenerse al tanto de lo que los diarios de Londres y demás lugares mágicos hablarán de la familia Malfoy, cada día era morir un poco por el miedo de que le pudieran quitar a Scorpius, y dañar aún más su reputación después de la penosa intervención de Ginevra en el juicio.

Desde ese día los diarios de Londres Mágico no paraban de recalcar lo extraño de los sucesos que rodearon el caso empezando por la acusación que, de buenas a primeras, surgió tras la muerte de Astoria y la desaparición del bebé Malfoy. Las historias se pudieron controlar cuando se entregaron los resultados de los testigos, en ellos aparecieron rastros de dos pociones una que provocaba confusión y otra que permitía control de las personas, similar a un Imperius, en ambos casos era muy difícil rastrearlas, el problema fue que entre los nombres de la lista que se hizo de conocimiento público para evitar que los testigos fuesen dañados como represalia a su participación, el de Ginny no apareció porque decidió no hacerse la prueba, algo que Rita Skeeter divulgó en medio de una conferencia de prensa en la que hacían el lanzamiento de la primera línea de productos cosméticos que tendrían venta en el mundo muggle y en el mágico.

Las preguntas comenzaron a llegar de los diversos medios de comunicación que cuestionaban las razones por las cuales la decisión de la señora Potter a pesar de ser citada en múltiples oportunidades.

La tormenta de interrogantes hizo que Ginevra tomara el micrófono de la mesa para responder, de pronto se llevó una mano a la cabeza finalizando el espectáculo con un fingido desmayo.

Los gritos solicitando la presencia de un medimago por parte de los ayudantes de Black & Red, reemplazaron los de los periodistas, Harry fue consciente de que transcurrieron unos cinco minutos para que los Aurores se presentarán sacándolos de allí.

Al día siguiente comenzaron los verdaderos problemas, nuevos artículos aparecieron con entrevistas de las compañeras del equipo de Ginny acusándola de humillarlas por ser la futura esposa del niño-que-vivió, incluso en esos testimonios se mostraron fotografía e informes médicos de las veces que fueron atacadas por maldiciones proferidas por Ginevra, y que al ingresar a San Mungo se borraba el nombre de la firma mágica evitando problemas.

Luego se hicieron presentes las quejas de los antiguos empleados de las empresas Malfoy que fueron despedidos, argumentando que en el tiempo que llevaban cesantes nunca habían recibido el pago de su liquidación, y que el abogado a cargo, un tal Sigmund Maxwell, los amenazaba en nombre de la señora Potter, y por no poner en riesgo a sus familiares se vieron obligados a guardar silencio hasta ese instante.

Esa situación derivó en el papel que tenía en sus manos. Las diferentes campañas publicitarias de artículos deportivos, de ropa y cosméticos que manejan las compañías del heredero Black con marcas a nivel nacional e internacional, exigieron un cambio en la imagen de quien los representa o darían por terminados los contratos.

En esos momentos le hacía falta Ronald, él siempre sabía cómo hablar con la prensa y con los inversionistas, su humor mezclados con los comentarios imprudentes llenos de verdades mantenían el ambiente tenso al margen, y luego entre risas volvían a las negociaciones.

ANGRA MAINYUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora