Preguntas y recuerdos.

238 21 0
                                    

Mi anterior visita a Komaeda me dejó con un sentimiento de incomodidad. Sus facciones se quedaron completamente gravadas en mi mente viniéndome a los pensamientos de vez en cuando.

¿De verdad él era una mala persona?

¿Por qué?

¿Por qué actuó todo el tiempo?

¿Todos los momentos que habíamos pasado juntos, también eran una mentira?

Sonreí irónico mientras recordaba algunos eventos a su lado. Sería un mentiroso so dijera que todo esto no me dolía.

...

Nos encontrábamos en la playa, caminando a la luz del atardecer. La arena aún seguía tibia al tacto con nuestros pies.

El sol escondiéndose pintaba el cielo de rosa y el clima empezaba a sentirse fresco. Pronto la luna y las estrellas comenzarían a notarse siendo testigos de nuestro encuentro.

Habíamos pasado gran parte de la tarde juntos hablando sobre nosotros y de alguno que otro tema vago.

En algún momento nos sentamos en la orilla del mar, las aguas estaban calmadas y las pequeñas olas iban y venían mojando nuestros pies causando un sentimiento refrescante y apacible en nosotros. El silencio reinaba entre los dos, sólo se escuchaban los sonidos del ambiente.

Lucía como un momento tranquilo y acogedor, pero no tardé en perderme en mis pensamientos que, no precisamente me hacían sentir de la misma forma.

-Hinata. ¿Estás bien? Te ves pálido

-¿Ehh? S-sí. C-creo que sí.

Me preguntaba como es que Komaeda podía estar tan tranquilo.

-Oh, que bien. Pensé que tal vez te sentías enfermo. Aunque, bueno, no te culpo. ¿Cómo no podrías sentirte de esa forma en una situación así?

En cuanto acabó de hablar soltó una pequeña risa, su voz y su mirada denotaban una despreocupación total. Verlo actuar de esa forma fue suficiente para distraerme y hacerme olvidar mis problemas, al menos por ese momento.

Sonreí.

-¿Qué es tan gracioso? -Komaeda preguntó sonriente.

-Realmente quería darte las gracias. Gracias por ayudarme en todo.

-Pero Hinata, si no ha sido nada. No he hecho absolutamente nada para merecerlo. Pero que pienses que alguien como yo haya sido de ayuda... me pone muy feliz.

-Eres muy rudo contigo mismo. -Le hice notar.

-No es como si yo pudiera ser muy útil. Después de todo mi talento sólo es tener suerte. No puedo hacer cosas geniales ni nada por el estilo, sólo tengo suerte. Demasiado diferente a todos ustedes.

-¿Pero qué dices? ¿Qué tal si mi talento no es tan bueno? Digo, ni siquiera se cuál es.

-Estoy seguro que tu talento es igual de impresionante como el de los demás. Después de todo fuiste capaz de entrar a hope's peak academy.

Komaeda en serio me ayudaba. Gracias a sus palabras podía lograr encontrar algo de confianza en mi mismo.

-¿Por qué no me dejas adivinar tu talento Hinata?

-¿A-ah?

-Veamos.. - Posó la mano derecha en su mentón. -¿Qué tal algo como serenidad definitiva? Estoy seguro que la habilidad de dar serenidad a los demás es un talento asombroso.

-¿Pero qué cosas dices? -Me ruboricé -Ni siquiera estoy seguro de que eso sea un talento, o si es útil de alguna forma.

-Entonces podría ser tal vez.. -Adoptó otra pose pensativa. - Estudiante torpe definitivo.

¿Puedo confiar? || KomaHina ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora