Capítulo 87. Sorpresa

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—Si estoy libre... ¿Te invito a una comida para compensarte? —dijo Ling Han.

—¿Cuándo?

Ling Han originalmente solo estaba siendo cortés, no esperaba que Lu Siyuan fuera tan entusiasta, por lo que solo pudo decir:

—Espera hasta que regrese de Heng Dian...

—¿Tanto tiempo?

Ling Han se acostó en la cama y dijo descaradamente:

—Sabes que me quedaré en Heng Dian durante al menos un mes. Si quieres que te invite antes, eso es a menos que vengas a Heng Dian tú mismo.

No hubo respuesta.

Ling Han se dio la vuelta y sintió que había ganado contra Lu Siyuan. Se sentía un poco orgulloso de sí mismo.

Hubo un golpe en la puerta. ¿Quién podría ser en medio de la noche? No puede ser Zhu Beixian otra vez, ¿verdad? No debería ser él, Zhu Beixian ya se había ido. Ling Han se levantó de la cama con impaciencia. Se acercó y abrió la puerta con fuerza. Lo que vio fue a Lu Siyuan sosteniendo su maleta en una mano y su teléfono en la otra.

Ling Han estaba estupefacto.

—¿Por qué...? ¿Por qué eres tú?

En ese momento, su mano derecha sostenía el teléfono cerca de su oreja. Llevaba un pijama holgado y su cabello estaba despeinado de tanto revolcarse en la cama como un nido de gallina.

Después de decir esa oración, se sorprendió mucho cuando escuchó su propia pregunta saliendo del teléfono negro de Lu Siyuan.

Lu Siyuan vestía un abrigo negro con cuello vertical, pero aún así era asombrosamente guapo. Le dio a Lu Siyuan una sonrisa que no era una sonrisa.

—¿Estás sorprendido?

Ling Han asintió sin comprender.

—¿No me invitarás a entrar?

—Oh —Ling Han volvió en sí y rápidamente se hizo a un lado para dejar que Lu Siyuan entrara en la habitación.

Después de cerrar la puerta, Ling Han se frotó las manos y preguntó:

—¿Por qué estás aquí?

—En un viaje de negocios —Lu Siyuan miró alrededor de la habitación y señaló la cama vacía—. Nadie está durmiendo ahí, ¿verdad?

Ling Han negó con la cabeza y dijo después de un momento de vacilación.

—Se dice que tengo un compañero de cuarto. Me pregunto cuándo vendrá.

—Oh, me quedaré a pasar la noche —Lu Siyuan abrió la maleta y sacó las cosas.

Ling Han miró a Lu Siyuan con impotencia. Incluso ahora, no podía imaginarse a Lu Siyuan apareciendo en frente de él.

Ling Han estaba muy cansado después de filmar durante todo el día, Lu Siyuan también estaba muy cansado después de viajar, por lo que no hablaron mucho antes de que se durmieran rápidamente.

Al día siguiente, Lu Siyuan todavía estaba durmiendo en la cama cuando se despertó. Su rostro estaba ligeramente inclinado, su piel era suave y brillante, y el puente de su nariz estaba puntiagudo, haciendo que Ling Han tuviera ganas de tocarlo. Descubrió que le gustaba Lu Siyuan, pero estaba decepcionado cuando recordó que Lu Siyuan dijo que ya tenía a alguien que le gustaba.

Si no te gusto, ¿por qué viniste aquí a verme?

Ling Han fue al baño a lavarse. Sin embargo, sintió que la otra persona estaba aquí en un viaje de negocios, por lo que no se burló de él en absoluto. Esto lastimó aún más a Ling Han.

Mis vergonzosos días con el Emperador del CineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora