VIVIR CON MIEDO

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Vivir con miedo es como estar encadenado 24/7,
los 365 días al año.
Es como si todos tus sueños pasaran delante tuyo y no podrías alcanzarlos.
Es como estar disfrazado de sonrisa, pero debajo, todo se está derrumbando.
Es torturarte cada día pensando en todo lo que harías si no lo tuvieras.
Es soñar con los ojos abiertos,  porque incluso en los sueños aparece.
Es no descansar, porque tu mente no para de pensar y de tener miedo, aún cuando cerras tus ojos por las noches.
Es sentir que no tenés un propósito.
Es pensar todo el tiempo que algo malo podría pasar.
Es una cárcel silenciosa que te mata lentamente, cada día un poco más.
Es sentirte insignificante y no poder avanzar.
Es levantarte con ganas de luchar, y que venga él, te susurre al oído, y que todo alrededor se empiece a desmoronar.
Vivir con miedo es decir "Estoy bien", cuando en realidad no lo estás, para que nadie sepa la verdad.
Es tener miedo a hablar, a que te juzguen.
Miedo a que se burlen.
Miedo a que crean que es un invento.
Miedo a que te vean llorando y en estado vulnerable.
Miedo a quedar expuesta.
Miedo a mostrar mi fragilidad, mi sensibilidad.
Miedo a que vean que sí soy débil a veces, y también me derrumbo.
Miedo a que no entiendan mis lágrimas.
Miedo a salir herida con palabras.
El miedo te lleva a pensar las peores cosas, en los días más tristes.
El miedo te detiene, te atrapa, te secuestra.
El miedo te hace retroceder y ver cuánto te falta todavía por recorrer; en lugar de ver cuanto haz logrado.
Y aunque ese miedo hoy te mantenga cautivo/a, debes saber,  que en la vida, siempre hay una salida.
A veces hay que luchar un poco más para encontrarla, a veces está escondida, pero está, siempre está.
Siempre estuvo ahí esperándote.
Buscala. No te rindas. Hoy podés ser libre de esa oscuridad.

Antología de un Monstruo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora